El máximo diplomático de China dijo ayer que los aranceles y las disputas comerciales podrían hundir al mundo en una recesión y que Pekín se comprometió a resolver los conflictos de manera “calmada, racional y cooperativa”.
En un discurso ante la Asamblea General de Naciones Unidas, el consejero de Estado y ministro de Relaciones Exteriores, Wang Yi, dijo: “Erigir muros no resolverá los retos del mundo y culpar a otros por los propios problemas no funciona. Las lecciones de la Gran Depresión no deben olvidarse”.
Sin nombrar al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien comenzó una guerra comercial con China hace casi 15 meses, Wang agregó: “Los aranceles y la provocación de disputas comerciales, que alteran las cadenas industriales y de suministro en el mundo, sirven para socavar el régimen comercial multilateral y el orden económico y comercial global”. “Incluso pueden hundir al mundo en una recesión”, advirtió y recordó que ambos países se han impuesto aranceles recíprocos.