“El veterinario de campo tiene que tener amor por el folclore de lo rural”

El país celebra hoy el Día del Veterinario y en este marco El Litoral dialogó con un profesional que trabaja en el campo, Yamil González, quien desde el año 2006 vive en Mercedes y fue encargado de una estancia, ahora es asesor y hace seguimiento de animales. 

“El veterinario de campo es una persona muy sacrificada, el horario del campo es de sol a sol, debe trasladarse kilómetros para hacer su trabajo y termina a la tardecita”, comentó a este medio gráfico.  

En esta provincia, contó, hay quienes asesoran en campos y hacen trabajo de veterinario que tiene que ver con análisis o raspaje de toros para identificar enfermedades, desparasitaciones, prevención y vacunación, etcétera. En este sentido, González relató que “el productor ganadero está muy en contacto con el veterinario y debería estar aún más; se calcula, según datos de un censo, que solo el 40% de los campos tienen un asesor veterinario”. 

“La ganadería es una empresa a cielo abierto y puede producir de diferente manera; si se asesora, evita pérdidas en la producción ganadera; por ejemplo, hacer que todas las vacas puedan parir en la misma época (por las identificaciones), también se pueden evitar enfermedades y lo peor que puede pasar es que se muera el animal. El veterinario ayuda mucho al campo y colabora a que llegue a su frontera productiva”, dijo. Agregó que el promedio de partos de vacas en Corrientes es del 60%, es decir, de 100 solo 60 tienen terneros. 

El 90% de los veterinarios de grandes animales trabaja con bovinos y hace ganadería, otros se dedican a los equinos, y en el sur de la provincia, a los ovinos. En este sentido, Yamil comentó que en Corrientes no hay mucha producción porcina, al igual que de chivo.  

“Hay muchas colegas mujeres que vienen a trabajar al campo, algo que antes no se veía. Creo que sí hay más estudiantes mujeres en la carrera; en mi época éramos 80% hombres, ahora son un 50%. Antes no se veía a las mujeres en el campo haciendo asesoramiento”, destacó el veterinario.  

En cuanto a la necesidad de trasladarse al interior, dijo que “hay muchos que viajan, no es una condición”. 

“Para ser veterinario, la primera condición es tener amor por los animales y el veterinario de campo tiene mucho contacto con ese folclore del campo. Hay que ser muy amigable con esa idea, la gente que viene de la capital del país por ahí no entiende mucho, a veces la gente habla en guaraní y para mí esto es muy lindo. Hay que tener un cariño muy grande también con lo rural”, resaltó en esta fecha especial.

(CSS)