El defensor del seleccionado de Australia Milos Degenek admitió ayer su admiración por Lionel Messi, al que calificó como “el mejor jugador”, pero destacó que el “honor” será disputar los octavos de final del Mundial de Qatar 2022.
“Siempre admiré a Messi, creo que es el mejor jugador, pero no es un honor enfrentarlo porque es un ser humano como nosotros”, manifestó Degenek en la conferencia de prensa que brindó luego del entrenamiento posterior a la histórica clasificación luego del triunfo 1-0 sobre Dinamarca.
“El honor es estar en los octavos de final de una Copa del Mundo”, remarcó el defensor, de 28 años, que tiene una singular historia de vida.
Degenek nació en Croacia en 1994, en medio de la guerra, y con apenas un año y medio escapó con su familia a Serbia.
Allí estuvo hasta los 7 años, cuando finalmente se instaló en Australia huyendo de la guerra de Kosovo.
A los 16 se fue a Alemania para iniciar su carrera profesional en Stuttgart pero la adaptación al invierno europeo no fue fácil. “No tenía plata para comprar una campera”, recordó en una entrevista con The Guardian.
Su experiencia internacional empezó en la sub-17 de Australia, luego defendió al seleccionado serbio en la sub-19 pero desde 2016 se decidió por representar a los Socceroos.
Después de la victoria contra Túnez, por la segunda fecha, Degenek publicó un sentido mensaje en su cuenta de Twitter.
“No es un posteo político o sobre cualquier guerra. Esto es para mostrar que la vida es lo más lindo que hay. De absolutamente nada a ganar un partido en un Mundial representando al país que me dio todo.
Nunca dejen de creer en ustedes mismos”, escribió el jugador de Columbus Crew, de la MLS estadounidense, junto con su foto llorando en el banco de suplentes y otra de la guerra de la independencia croata.