En este sentido, pocas personas conocen los costos tanto financieros como de gestión que cuesta el trabajo agrario. Se trata de uno de los trabajos más complejos y dependientes del azar que existen. De nada sirven los pulverizadores de calidad cuando el clima es de sequía o cuando los tractores se atascan en la tierra si las lluvias inundan los campos. Por esta razón, es bueno saber algo sobre cómo funcionan las maquinarias en nuestra tierra.
Las maquinarias agrícolas, sin embargo, son los elementos más importantes a la hora de crear campos fértiles y productivos. No es raro, en este sentido, que año a año salgan al mercado nuevas máquinas más modernas, más ágiles, más fáciles de manejar y que ahorren más combustible. Después de todo, ahorrar en energía y tiempo de trabajo siempre es beneficioso para los productores agrícolas.
Desde los tractores Massey Ferguson 1195 hasta cualquier clase de cosechadora o tolvas, estas maravillas tecnológicas son esenciales para cualquier campo que busque productividad y eficiencia. De todas formas, en la actualidad el clima en nuestras tierras es más que aceptable para sembrar y cosechar, por lo que pensar en maquinarias de calidad es una idea muy viable y una inversión más que aceptable.
En este caso, como muchos habrán notado por el título, queremos hablar de las pulverizadoras o pulverizadores, maquinarias indispensables para proteger nuestros cultivos de insectos, hongos y otros agentes que pueden dañar nuestras cosechas. A fin de sembrar plantas y granos sanos y fuertes, las pulverizadoras son utilizadas hace casi un siglo para cuidar de nuestros productos.
Pulverizadoras: esenciales e indispensables para nuestro campo
Las máquinas que trabajan como pulverizadores se encargan de combatir cualquier clase de plaga o enfermedad que afecte a los cultivos de los campos de forma homogénea. Dependiendo la maquinaria, efectúa esta tarea entre ciertos rangos dependiendo el tamaño de nuestra cosecha. De esta manera lanzan gotas y gotas de pulverizadores sobre el suelo con la intención de proteger las plantas que crecemos en el campo.
Cada una de las pulverizadoras puede ser configurada para limitar la cantidad de fitosanitarios que se lanzan al suelo en gotas, dado que no todas las tierras o cosechas son iguales. Estas deben ser calibradas y aprovechadas de la mejor manera si se quiere tener un rendimiento aceptable.
Por esta razón, existen muchos tipos de pulverizadores con diferentes capacidades. ¡Veamos algunas de ellas!
Tres tipos de pulverizadoras
En primer lugar tenemos a las pulverizadoras de acople, las cuales funcionan siendo empujadas a través de un tractor. Se trata de las más económicas ya que no tienen una maquinaria propia que las lleve, sino un buen tractor, ya sea un Massey Ferguson 1195, como puede ser otro. Estas simplemente cargan el tanque sobre dicho tractor y fumigan las tierras necesarias según el conductor considere necesario.
Por otro lado, tenemos a los pulverizadores de arrastre. También acompañados por tractores, estas máquinas tienen una gran fama en Argentina, sobre todo por su producción local. Las pulverizadoras de arrastre prometen una gran sencillez a la hora de conducirlas, evitan los terrenos desnivelados, y tienen una altísima calidad de aplicación de componentes químicos.
Finalmente, tenemos a los pulverizadores autopropulsados. En este caso no hace falta la ayuda de tractores ya que, justamente, son maquinarias autopropulsadas. Por lo general tienen un tanque de acero inoxidable ubicado en el centro de gravedad de la máquina a fin de promover mejor dispersión de sus fitosanitarios. Son máquinas de muy bajo consumo porque su motor sabe automáticamente cuando acelerar o desacelerar.
¡Las tecnologías que favorecen al campo siguen creciendo más y más conforme pasa el tiempo! Este es el momento de hacer las inversiones que mejor nos parezcan para mejorar, cuidar y hacer de nuestros campos unos mucho más productivos.