El periodista Federico Soto fue condenador a siete años de prisión por abusar sexualmente de una joven por una denuncia radicada en el verano de 2018. Sin embargo permanecerá en libertad hasta que la sentencia quede firme. La lectura de los fundamentos del fallo será el día 21 de diciembre a las 12.45 horas.
El Tribunal presidido por el doctor Román Facundo Esquivel y los vocales; doctores Juan José Cochia y Ariel Héctor Gustavo Azcona, resolvió hallarlo culpable de los delitos de: abuso sexual con acceso carnal, en concurso real con abuso sexual simple en calidad de autor.
A su vez, impuso al condenado el impedimento de contacto por sí o por terceras personas por cualquier medio con la denunciante de conformidad a lo establecido por la Ley N° 27.372 bajo apercibimiento de incurrir en el delito de desobediencia.
También se le impuso la obligación de concurrir trimestralmente (del uno al diez) al Tribunal hasta tanto quede firme la sentencia.
En la audiencia de la semana pasada se llevaron a cabo los alegatos y la abogada querellante Sofía Domínguez pidió 19 años de prisión y la detención inmediata mientras que el fiscal de juicio, doctor Gustavo Schmitt, pidió siete años.
El juicio caratulado “presunto abuso sexual con acceso carnal, en concurso real con abuso sexual simple” inició el 9 de noviembre pasado y se desarrolló en cinco audiencias hasta la fecha.
En el debate declaró la víctima y dio detalles de la relación de amistad que tenía con el imputado hasta que fue atacada sexualmente,
Explicó los motivos por los cuales demoró mas de un año en radicar la denuncia y que fue el apoyo y la contención que encontró en el Colectivo Mujeres Organizadas, lo que la ayudó a entender que había sido abusada sexualmente.
La causa
Una denuncia pública y anónima que se viralizó en las redes sociales dio inicio a la causa judicial.
La víctima contó detalles del ataque sexual y el caso cobró relevancia en el ámbito social, periodístico y universitario debido a que el acusado, al momento de la denuncia, cursaba sus estudios en la carrera de Comunicación Social de la Universidad Nacional del Nordeste, donde también se formaba la denunciante.
Según la acusación el primer hecho se produjo el 29 de diciembre de 2016. Soto invitó a la joven a tomar tereres en un departamento ya que tenían una relación de amistad. Cuando ella ingresó, él llaveó la puerta. Luego de una charla la llevó en contra de su voluntad al interior de una habitación. Pese a la constante negativa de la joven, él la sometió porque le había advertido que no se iría hasta que todo concluyera.
El segundo episodio que hace mención la denuncia, ocurrió en el interior de un local bailable en septiembre de 2017.
La joven asistió al lugar donde coincidió que estaba Soto. Según su relato, él se abalanzó sobre ella y la arrinconó contra una pared. Allí fue manoseada y tuvo que intervenir un policía a quien le pidió ayuda.
Cabe recordar que este caso impulsó la creación de un Protocolo de intervención para situaciones similares, en la carrera de Comunicación Social, dependiente de la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE). El protocolo se encuentra vigente ante situaciones de discriminación y violencias de género u orientación sexual. Este instrumento legal al activarse, busca impedir que denunciados y denunciantes, se crucen en los ámbitos educativos. afirmó en declaraciones radiales. (NG).