Por Gabriel Enrique del Valle
Periodista e investigador
Especial para El Litoral / Colaboración.
El 49no gobernador de la provincia de Corrientes, Fernando Piragine Niveyro (1958-1962), fue un gran propulsor de obras públicas; pero, sin dudas, el aeropuerto internacional “Cambá Punta” fue y será un mojón en la historia de Corrientes.
Piragine Niveyro “lo exhibía con orgullo, aun después de su gestión”(1), siendo ya diputado nacional.
“Cambá Punta”
“Cambá Punta” es el nombre original del aeropuerto internacional de la Ciudad de Corrientes (hoy, “Gobernador Fernando Piragine Niveyro”).
Se debe a que el mismo fue construido sobre la margen izquierda del río Paraná donde existe una saliente rocosa, idéntica a las muchas otras que caracterizan a la costa correntina vecina de la ciudad capital.
Aquella saliente se llamó “Cambá Punta” a partir del asentamiento -en ese lugar- de numerosas familias negras, tal como ocurrió en otros sitios de la costa.
Su significado es “Punta de los Negros” y no “Punta Negra”, como a veces se traduce. Es uno de los tantos topónimos híbridos(2).
Otra autora correntina enseña que es la “punta de la costa del Paraná, en el departamento Capital, frente a la Isla Meza(3). Ex denominación del aeropuerto internacional de Corrientes.
La obra de Piragine Niveyro en
“Cambá Punta”
Ya desde octubre de 1958, el Consejo Coordinador de la Administración de Piragine Niveyro crea una comisión para generar estudios de navegación aérea e iniciar tareas en el aeródromo “Cambá Punta”, sobre la base de un proyecto originario de 1950 efectuado por la Secretaría de Aeronáutica de la Nación, que no se concretó por falta de recursos.
Sin embargo, será a partir de octubre de 1960 cuando Oronzo Vinci Mastrogiácomo, ministro de Obras Públicas, anunció la creación del Consejo Provincial de Aeronáutica por decreto del Poder Ejecutivo Nº 3.056, entidad que asumirá funciones de actividades aeronáuticas en Corrientes.
Este Consejo estaba integrado por el propio ministro, un representante de Vialidad Provincial, un técnico de la Dirección Provincial de Energía, un representante de la Dirección de Arquitectura y Vivienda y otro de la Comisión de Aeronáutica del Consejo de Promoción Industrial. Este nuevo Consejo debería estudiar sobre la navegación aérea e industria aeronáutica y organizar la aviación comercial.
Corrientes había generado un gran tráfico aéreo, por las precarias vías de transporte y comunicación terrestres, por lo que el proyecto del Gobierno de Piragine Niveyro fue más ambicioso. Los delegados de los aeroclubes de la zona solicitaban formar una empresa llamada “Aerolíneas Correntinas” y por ley Nº 2.096 de 1960 se iniciaron arreglos en los aeropuertos y pistas de aterrizaje de los aeroclubes y de propiedad municipal en la provincia.
Es así que, por decreto Nº 5.042 se da lugar a la licitación pública Nº 7 para la construcción de un aeropuerto en la ciudad capital y, por decreto Nº 5.043, el mecanismo para balizamiento eléctrico. Por ley Nº 2.201 se creó la Dirección General de Aeropuertos de la Ciudad de Corrientes “Cambá Punta”.
La Dirección Provincial de Vialidad se ocuparía del pavimento y el alumbrado perimetral; la Dirección de Arquitectura y Vivienda construiría los edificios; y la Dirección Provincial de Energía se ocuparía del balizamiento eléctrico y de la usina.
Esta obra extraordinaria se realizó sobre 800 hectáreas, entre el río Paraná y la Ruta 12, a 8 kilómetros de la capital correntina, terreno que pertenecía a la Colonia “La Palmira” y que había sido cedido al Gobierno provincial.
La pista, cuya construcción se inició en julio de 1958, consistía en un pavimento de 2.400 metros, con 45 metros de ancho, para aterrizaje de motores a pistón o “jet”, como el de reactores, que soportaba 20 toneladas por rueda, cifra mayor que la del aeropuerto de Ezeiza.
Poseía una moderna aeroestación provisoria, un confortable restaurante y alojamiento funcional, que comprendía 2.000 metros cuadrados. También, comprendía una torre de control, un hangar de nariz para mantenimiento, una usina, una torretanque de 50 mil litros, una cisterna de 250 mil litros, un pabellón meteorológico y otro de seguridad.
El sistema de balizamiento era el más moderno, eléctrico, fijo y de luces de alta intensidad, tipo Calvert, para condiciones meteorológicas desfavorables. El sistema radioeléctrico y de ayuda a la navegación comprendía un radiofaro de muy alta frecuencia, balizas indicadoras, equipos de comunicación y equipos VHF.
También, se proyectó un barrio de viviendas para el personal y un parque regional dentro del área de “Cambá Punta”, que no se concretó.
El aeropuerto estaría en el centro de una circunferencia de 1.800 kilómetros de radio (menos de dos horas de aviones modernos) y, dentro de él: Buenos Aires, Montevideo, Santiago de Chile, Asunción, Brasilia, La Paz, Lima, San Pablo, Río de Janeiro, Porto Alegre, Santa Cruz.
Dirigió la obra el ingeniero Enrique Bermúdez y los trámites administrativos de su aprobación a cargo del agrimensor Domingo Tassano.
“Aerolíneas Argentinas”, en un plan de racionalización de flota para Corrientes, Misiones, Entre Ríos y Formosa, abandonó el servicio de hidroaviones y, cuando se comenzaron a construir los aeropuertos, inició los vuelos de los aviones DC-4 y DC-6.
En el año 1961 se clausuró la Convención Zonal de Aerolíneas Argentinas y la compañía presentó el Avro 748 Turbo-Hélice y con radar, con capacidad para 40 personas y velocidad de 420 km/hora, que reemplazó a los DC e hidroaviones en “Cambá Punta”.
El aeropuerto fue inaugurado el 28 de octubre de 1961, con la presencia del presidente, doctor Arturo Frondizi; su esposa y una gran comitiva oficial de legisladores nacionales, embajadores, ministros y los gobernadores de Buenos Aires (Salvador Allende), de Santa Fe, Entre Ríos, Santiago del Estero, Chaco (Anselmo Z. Duca), Formosa y Misiones, que llegaron en el Comet IV “Arco Iris”, piloteado por el comandante correntino Miguel Saúl Andreau, de Aerolíneas Argentinas, y que iniciaba sus vuelos por el Litoral.
En el acto, dijo
Piragine Niveiro:
“El aeropuerto que inauguramos está llevado a tener una importancia decisiva en la reactivación económica y cultural del Nordeste argentino”. Por su parte, el doctor Frondizi señaló: “Fue un acto emocionante. Estoy muy satisfecho como presidente y como correntino que soy”(4).
Esta obra era importante para el Gobierno como promoción económica, para las empresas aéreas por el volumen de transporte de pasajeros y cargas, y para el pueblo porque era el principal destinatario como usuario.
Los vuelos que se hacían eran de cabotaje nacional e internacional, permitiendo enlaces con la red nacional y sudamericana de navegación aérea. Los primeros vuelos internacionales se realizaron a Asunción, en aviones “Caravelle”. El primero se hizo en un DC-3-7-27 paraguayo, el 23 de noviembre de 1961; ese día se inauguró el servicio de colectivos al aeropuerto, a cargo de la empresa “Turismo Enco”.
“El pueblo correntino celebró gozoso y emocionado la feliz realidad, en ese día 40 mil personas, largas caravanas de automóviles, motos y bicicletas recorrían las rutas de acceso al aeropuerto...”(5).
El jefe de Pilotos y Operaciones Aéreas del Gobierno, Leandro R. Andreau, con el que viajaba constantemente el Primer Mandatario, dijo: “Reequipó la Dirección de Aeronáutica con cuatro naves Beecheroft Barón, con los que se volaron millares de kilómetros en cumplimiento de misiones específicas.”; y agregó: “En reciente investigación técnica, la misma dio por resultado que el aeropuerto “Cambá Punta” es apto por tonelaje hasta para operación de los aviones Jumbo (Boing 747)”(6).
En la inauguración, el presidente Frondizi señaló que “‘Cambá Punta’ ya está en la punta del viento”(7), como metáfora del progreso por el que tanto luchaba el que hoy lleva el nombre del aeropuerto.
Fernando Piragine Niveyro “desechó la modalidad política de hacer tabla rasa con los planes de sus antecesores”, señala María Alejandra Lovatto en su obra sobre Piragine Niveyro y es verdad, ya que la obra de su antecesor en obras públicas, el interventor nacional Manuel Norman Bianchi(8) fue sobresaliente. He ahí el acierto del gobernador al continuar con las obras de la Administración anterior. Con firme ejecutividad y una efectiva legislación, convencido del “hacer” cotidiano, inició obras básicas para el futuro desarrollo de la provincia.
Así, construyó pistas de aterrizaje y aeropuertos, enripió y pavimentó caminos y puentes y logró su enlace con la red troncal nacional, poniendo fin al aislamiento de algunas zonas, como la costa del Uruguay, facilitando la circulación y el transporte de los productos correntinos en la región. Amplió la red de comunicaciones radioeléctricas y reordenó el transporte en todas sus ramas.
La construcción del Aeropuerto Internacional “Cambá Punta”, sin dudas, fue la obra monumental de su gestión y un hito fundamental en la reactivación económica de la provincia y la salida de sus productos al exterior.
Los aeropuertos y los hoteles de turismo demuestran la gran visión de futuro de este gobernador al favorecer el intercambio económico, turístico y cultural.
NOTAS
(1) Roberto Gustavo Pisarello Virasoro. “Arturo Frondizi (su Pensamiento)” (2000). Ed. Gráfica Integral, Buenos Aires. // Citado por María Alejandra Lovatto. “Fernando Piragine Niveyro” (2004), Corrientes.
(2) Citado por el profesor José Miguel Irigoyen. “Toponimia Guaraní de Corrientes” (1994). Editado por el Instituto de Antropología “Juan B. Ambrosetti” de la Universidad de Concepción del Uruguay (Entre Ríos).
(3) Citado por Isabel de Asuad en el libro de su autoría: “Esto es Corrientes”.
(4) Diario “La Mañana”, (Corrientes), del 28 de octubre de 1961. // Citado por María Alejandra Lovatto. “Fernando Piragine Niveyro” (2004), Corrientes.
(5) Diario “La Mañana”, (Corrientes), del 5 de noviembre de 1961. // Citado por María Alejandra Lovatto. “Fernando Piragine Niveyro” (2004), Corrientes.
(6) Entrevista a Leandro R. Andreau en febrero de 2004, en María Alejandra Lovatto. “Fernando Piragine Niveyro” (2004), Corrientes.
(7) Diario “El Litoral” (Corrientes), 15 de agosto de 2000. // Citado por María Alejandra Lovatto. “Fernando Piragine Niveyro” (2004), Corrientes.
(8) Manuel Norman Bianchi administró la provincia desde el 3 de octubre de 1955 hasta el 1 de mayo de 1958. // Citado por Gabriel Enrique del Valle. “Los hombres que gobernaron Corrientes (Compendio de Historia Política)” (2007), Corrientes.