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/Ellitoral.com.ar/ Cultura

Con el empuje de los históricos y los jóvenes, el metal se abre paso en el festival

Impulsores de la música heavy en Corrientes destacaron la inclusión del género en el Taragüí, y notan un “cambio” en el público. Por su parte, los artistas emergentes llamaron a ser más “creativos” para mantener encendida la llama.  

Millones de litros de combustible quemado lleva ya el heavy metal en Corrientes y en la región, en un camino marcado por el empuje diario que llevan adelante los músicos de este género, muchas veces contrariados por tener que hacer un esfuerzo doble a la hora de conseguir un lugar para tocar o convocar al público. La base de esta fuerza son los artistas que llevan ya más de 30 años en escena, protagonistas de momentos y canciones clásicas del rock pesado, y que supieron ganarse un lugar para que las nuevas bandas  del palo puedan demostrar su talento.

Para ambas generaciones, el hecho de tener oportunidades en un festival de música grande en la región, como lo es actualmente el Taragüí Rock, significa un gran paso en la consolidación del metal en la zona. De igual forma, también saben que es una labor en la que no se puede aflojar nunca, y para seguir por este sendero necesitan del apoyo de todos: público, empresarios y Estado.

La jornada rockera del sábado fue un deleite para los metaleros, ya que se congregaron bandas históricas, otras más recientes y las ya consagradas como Carajo y Cabezones. El Litoral dialogó con los integrantes de algunos de los grupos de la zona que pudieron subirse al escenario, para analizar la actualidad del heavy local, su evolución, sus virtudes y  sus defectos.

El “Negro” Ricardo es uno de los impulsores de la movida pesada en Corrientes. Su antiguo “puesto heavy” de la plaza Cabral, donde vendía remeras y otros productos relacionados al rock, fue el primer stand del tipo en la ciudad, y el sábado pasado tuvo la posibilidad de tocar en el Taragüí con una de sus bandas insignia: Bastión.

Tras el show, el “Negro” comentó a El Litoral que “el público ha cambiado bastante desde los 80 hasta ahora”, aunque “es la misma gente y siempre vas a ver las mismas caras: los veteranos y algunos de los hijos de los veteranos”. Asimismo, destacó el “sueño cumplido” que le significó “el poder tocar con buenos equipos y un buen escenario”. “Es la magia para cualquier banda poder tener un video bueno, y que quede algo de nuestra historia registrado”, sostuvo.

En esta misma línea, se pronunció Ariel Cañete, guitarrista de la histórica Madre Noche, banda originada en la ciudad a principios de los 90, y una de las pilares dentro del metal correntino. “Hay cierto cambio en la movida, primero, que no había esta clase de espectáculos hechos por la misma provincia, y lo mejor es que le dan posibilidades a las bandas locales para poder expresarse. Hay grupos que son tan profesionales como cualquiera de otro lado, por ahí sin las posibilidades económicas que tienen que tener para poder explayarse más”, manifestó.

En ese sentido, aseguró que “es necesario que las autoridades municipales sepan que las bandas tienen que tener lugares para tocar, porque con los impuestos o ciertas cuestiones impiden que las bandas puedan explayarse”. “Ese es un tema muy importante de decirlo, para que nuestra cultura crezca, y para eso tiene que haber libertad”, subrayó.

"En el público siempre vas a ver las mismas caras: los veteranos y algunos de los hijos de los veteranos". “Negro” Ricardo, cantante de Bastión.

 

Sangre joven

El Quinto Poder es un grupo de metal progresivo que nació en Resistencia hace casi diez años, e integrado por jóvenes músicos que ostentan ya una vasta experiencia en la escena. Los chicos se mostraron agradecidos por la oportunidad de presentarse por primera vez en el Taragüí y compartir escenario con otros grupos históricos, pero marcaron algunos conceptos que consideran importantes para que la escena siga creciendo.

“Años atrás hemos carecido de lugares, se nos cerraban las puertas, pero hoy en día veo que hay muchos bares lindos, muchos eventos que hacen las provincias y los municipios. Lo que falta capaz es algo de aguante por parte del público”, opinó el tecladista Vladimir Vagabculow.

Por su parte, el cantante Adso Maidana hizo foco en la necesidad de que cada banda deba generarse los espacios. “No tenemos que echarle toda la culpa a la gente o al Gobierno, por eso insto a todos los artistas, que estamos peleando en esto, a ofrecer propuestas que llamen la atención de la gente, que demanden un feedback, y así se va a ir separando esa barrera de hormigón entre la escena under y los pocos exponentes de la escena nacional”, expresó. 

Gerardo Morales Cuyé.

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