Mejorando las majadas

La actividad ovina busca recuperar el terreno perdido y volver a ser una de las actividades ganaderas más importantes que tuvo en el Siglo XX. Sin embargo, los productores actualmente se encuentran con algunos obstáculos, propios y ajenos, que no permiten lograr el desarrollo y apuntalar la producción ovejera, que tiene su mayor potencial en los departamentos del Centro-Sur, pero que también se impulsa para el Norte de la provincia.

A mediados del siglo pasado, Corrientes fue una potencia en materia ovina. Con 4,5 millones de cabezas que se criaban en grandes estancias, campos medianos y pequeños establecimientos, tanto como actividad principal como también como complemento de la ganadería vacuna, la región Centro-Sur de la provincia supo ser exponente en materia ovejera.

Sin embargo, con el correr de los años y empujados por algunas cuestiones de mercado, como la caída del precio de las lanas, el recambio generacional en las empresas ganaderas, el corrimiento de la actividad hacia el Sur del país y hasta los problemas de abigeato, los productores fueron abandonando la cría de ovinos.

Actualmente, según un relevamiento realizado hace casi 10 años, Corrientes cuenta con un stock de alrededor de 1 millón de ovejas, donde Mercedes, Curuzú Cuatiá, Paso de los Libres y La Cruz son los departamentos de mayor producción.

“La producción en los últimos años tuvo un estancamiento importante”, consideró Domingo Emilio Aguilar, profesional referente de la actividad ovina en el Inta Mercedes. Con un recorrido casi diario por los campos ovejeros de la zona, Aguilar explicó que “en los últimos años no acompañó el clima, venimos de varios años Niño, con excesivas lluvias, que generaron que en la época de parición de la oveja disminuya la cantidad de madres y corderos logrados”, explicó Aguilar.

En este sentido, también recordó un hecho que tomó notoriedad el año pasado, en el mes de octubre, donde una abrupta baja de la temperatura hizo que alrededor de 10 mil ovejas mueran de neumonía, dado que habían sido recientemente esquiladas. 

Otro factor negativo para la cría de ovejas en la provincia es la presencia del chancho salvaje, un animal silvestre que en los últimos años ha ocasionado serios daños en las majadas, dado que ataca, mata y hasta se alimenta de ovejas y corderos. “Esto estaba diezmando algunas majadas, porque el chancho se había mal impuesto a comer corderos y ovejas. Esto generó un poco la caída de la intención de seguir criando, y en algunos casos a abandonar la actividad”, contó Aguilar. 

No obstante, en este sentido hubo un cambio en las últimas semanas, ya que a partir de legislaciones provinciales se declaró al chancho salvaje como especie dañina, y se permite un control sin veda, tanto con la modalidad de caza como con otros sistemas de control. “Con esto probablemente vuelva a prosperar la actividad ovina en la región”, comentó el profesional del Inta Mercedes.

El último problema –pero quizá el principal- que atentó en las últimas décadas contra la producción ovina en Corrientes es el abigeato. Un problema recurrente, que si bien ha tenido algunos avances con la Fiscalía Rural de Mercedes, que fue puesta en marcha en los últimos años, continúa generando muchos dolores de cabezas a los productores.

“Es un problema recurrente, que lamentablemente se pone peor en épocas de crisis económica, como la que estamos viviendo”, explicó Domingo Aguilar.

En este aspecto, el profesional y productor de Mercedes alertó puntualmente sobre un problema que están notando en el control de las fuerzas armadas, y que ya se lo advirtieron a las autoridades de la zona. “En el último tiempo las fuerzas provinciales incorporaron a jóvenes que se suman al Priar (la Policía Rural), y no cuentan con el conocimiento, la experiencia o preparación para hacer el seguimiento de los casos”, explicó Aguilar. Quien fue tajante sobre el problema del robo de animales: “Desalienta muchísimo a seguir en la actividad”, sostuvo.

Potencial

Más allá de los aspectos negativos que atentan históricamente contra la actividad, Domingo Aguilar consideró que la producción ovina tiene un enorme potencial para desarrollar en los campos de Corrientes, particularmente en la zona Centro-Sur, pero también con nichos puntuales en el resto de la geografía provincial.

“Tienen el ecosistema ideal para poder hacerlo. El tema es encontrar la motivación y la gente que se dedique”, comentó el profesional del Inta. En este aspecto, sostuvo que “esta falta de desarrollo de la actividad en esos lugares, es un lucro cesante que tienen los propietarios, debido a que normalmente están desarrollando otra actividad, como la ganadería bovina, y podrían tener el complemento ideal y tener un incremento de su producción, sin duda alguna”.