España cumple hoy un mes y un día bajo confinamiento por la emergencia sanitaria provocada por el coronavirus habiendo recuperado parcialmente su actividad económica, un paso que el gobierno del presidente Pedro Sánchez valoró mientras el brote continúa en retroceso en el país.
La vuelta al trabajo de algunos sectores como el manufacturero y de la construcción que "hibernaron" durante las últimas dos semanas se "está desarrollando con normalidad", aseguró la vocera del Ejecutivo y ministra de Hacienda española, María Jesús Montero, en videoconferencia.
Empresas que no realizan labores esenciales y que se vieron afectadas por un decreto excepcional que estuvo en vigor desde el 30 de marzo al 9 de abril, empezaron a recuperar de forma gradual su actividad desde ayer, principalmente en Madrid y el sur del país, ya que en ocho regiones era feriado.
En Barcelona, la capital de Cataluña, una región industrial donde la vuelta al trabajo se produjo ayer, se registró una mayor afluencia de tráfico en las calles respecto a los días previos y en el transporte público, donde voluntarios de la Cruz Roja y agentes repartieron barbijos tras el anuncio del gobierno central de que iba a facilitar esta protección en los desplazamientos.
En la calle Pujades del barrio barcelonés de Poble Nou, una antigua zona industrial rehabilitada que conserva algunas empresas tradicionales y sumó numerosas tecnológicas, cinco mujeres cubiertas con barbijos esperaban con resignación a las puertas de una fábrica de repuestos de lavarropas para cumplir con su turno una vez culminaran las labores de desinfección.
"Nos dan barbijo y guantes, pero no estoy tranquila, esta enfermedad es peligrosa, quisiera estar en mi casa", dijo a Télam una de las mujeres, que prefirió no identificarse.
"Tendrían que haber esperado que la situación mejore un poco más, pero las empresas están presionando", lamentó otra de las mujeres, si bien en su fábrica se reorganizaron los turnos para que haya el mínimo de trabajadores en la planta al mismos tiempo.
Las organizaciones empresariales admitieron que no todas las empresas cuentan con el material necesario para proteger a sus trabajadores, especialmente las pymes, a las que el gobierno exige desinfección constante y máscaras especiales EPI.
Las autoridades regionales de Cataluña, la segunda región más afectada por la pandemia, no apoyan la flexibilización, aunque tomaron medidas adicionales de protección, como exigir a las empresas que tomen la temperatura a sus trabajadores dos veces al día.
(JML)