Apuestan a una revalorización de la historia de las siete puntas

“Corrientes soñadora, con balcón hacia el río”  compuso Pocho Roch en lo que es la metáfora por excelencia que grafica a una ciudad que sobre ese mirador ubicado en el margen del imponente río Paraná también cuenta con sus características siete puntas. Durante este verano e impulsados por el Ministerio de Turismo de la Provincia y la Municipalidad capitalina, buscarán retomar la revalorización histórica de las tradicionales salientes que distinguen a Corrientes de otros lugares del mundo.

A través de los paseos náuticos, ofrecidos por distintas empresas de la ciudad, desde el río Paraná pueden observarse con detalles la presencia y la importancia de las siete puntas de Corrientes, cada una con su particularidad y su historia contada por los guías en un recorrido que busca la revalorización  histórica de las salientes que caracterizan a la ciudad desde sus inicios.

En el extremo Sur de la costanera, donde diariamente miles de bañistas aprovechan el verano para acercarse a las playas, se ubica la punta Arazaty, nombre del arroyo que desagua en la zona y además en el punto de nacimiento de la ciudad de Corrientes a partir de 1588 con el desembarco del adelantado español Juan Torres de Vera y Aragón. En la punta se ubicó el asentamiento más antiguo de la urbe.

Continuando sobre el margen del río Paraná hacia el Norte, se localiza la punta Isiry, más conocida como Tacurú, donde actualmente se encuentra el monumento a Juan Ramón Vidal. Su nombre original era “itá curú” que significa piedra arrugada en lengua guaraní.

Posteriormente, se encuentra la punta Tacuara, donde en la actualidad se sitúa la Dirección de Turismo, y que antiguamente poseía tacuarales característicos de los cuales quedan pocos ejemplares.

Río arriba se emplaza la punta Ñaró, más conocida como San Sebastián en homenaje a uno de los patronos de la ciudad según relatan los guías turísticos, siendo uno de los lugares paisajísticos más retratados y pintorescos de la ciudad

Ya hacia el Norte de la ciudad se encuentra la punta Arazá, que en guaraní hace referencia a una especie de árbol frutal como el guayabo, más conocido como punta Mitre y donde el monumento a Bartolomé Mitre y a Las Cautivas recibe a los visitantes que navegan sobre el río Paraná. Es un lugar histórico por ser una zona de defensa durante la Guerra de la Triple Alianza.

En las inmediaciones del Puerto Italia se ubica la punta Yatictá, que en guaraní significa caracol de tierra y que también hace referencia a otro árbol de frutos negros que crece en la zona, y que es un lugar de pescadores y la actividad arenera, características que pueden apreciarse desde las embarcaciones.

La última saliente hacia el Norte es la punta Aldana, que no posee nombre guaraní y hace referencia al apellido de un antiguo propietario de la zona, y se trata de la única punta que no cuenta con defensas artificiales.  Asimismo, una antigua embarcación hundida en las inmediaciones de la punta Aldana sirve de protección contra el impacto del agua, lo que permite apreciar la vegetación y la naturaleza de la saliente casi de la misma forma en la que avistaron los primeros viajeros que navegaban río abajo sobre el Paraná hace más de cuatro siglos.