Una joven de 26 años que estaba desaparecida desde el 4 de abril último fue hallada ayer asesinada adentro de una bolsa enterrada a 200 metros de la casa de su ex pareja, quien ya estaba detenido como sospechoso del femicidio, en el partido bonaerense de Moreno, informaron fuentes judiciales.
Se trata de Camila Aldana Tarocco (26), quien se convirtió en una nueva víctima de femicidio desde el inicio del aislamiento social, preventivo y obligatorio decretado por el coronavirus el 20 de marzo último.
En tanto, el detenido Ariel Alberto González (33) había sido denunciado por Camila, quien lo acusó de lesiones y amenazas, y luego beneficiado por el juez Garantías de Moreno-General Rodríguez 2 Gabriel Castro con un arresto domiciliario, dijeron a Télam los voceros judiciales consultados y los propios familiares de la víctima.
El hallazgo del cuerpo se produjo cerca de las 0.30 de la madrugada del martes último en un descampado situado en avenida Monsegur y calle San Cayetano, cerca del predio recreativo del Sindicato de Seguros y a dos cuadras de la casa de González, en la localidad de La Reja, en Moreno.
Una brigada policial llegó hasta ese lugar con canes rastreadores que detectaron tierra removida entre unos pastizales y finalmente se encontró una bolsa negra que contenía el cadáver de Camila, quien tenía dos hijos de 5 y 7 años con el acusado.
Tras el hallazgo, la fiscal 3 de Moreno-General Rodríguez, Luisa Pontecorvo, se presentó en el lugar y ordenó trasladar el cuerpo a la morgue de ese departamento judicial para que se lleve a cabo la autopsia.
Ayer, los médicos forenses que practicaron la necropsia no pudieron establecer la mecánica del crimen ya que el cadáver estaba deteriorado y sin lesiones visibles, aunque estimaron que la muerte se produjo de manera traumática hace 10 días, es decir, casi al mismo tiempo en que la víctima desapareció.
El acusado González será indagado hoy por la fiscal Pontecorvo, al tiempo que los dos hijos de la pareja quedaron al cuidado de familiares del hombre, con quienes vivían antes del crimen.
En base a una serie de indicios y contradicciones, la fiscal dispuso el 8 de abril la detención de González, quien, además, había violado el arresto domiciliario dispuesto en la causa por lesiones y amenazas a cargo del juez Castro. A su vez, González tenía otros antecedentes penales desde 2013, entre ellos, un robo agravado. Por otra parte, en la casa del acusado se secuestró una pala con tierra seca y otras pertenencias de la joven, aunque no lograron localizar aún su teléfono celular.
(EN)