Trabajadores del volante de Saladas realizaron protestas -tanto ayer como el último domingo- para solicitar cambios en el protocolo aplicado al sector. Según indicaron, el malestar se genera porque al regresar de sus viajes si ingresan a la ciudad y toman contacto con sus familias, éstas deben permanecer aisladas por 14 días. Por este motivo, los transportistas optan por permanecer en sus camiones en el acceso a la ciudad o en casas de compañeros en las afueras del casco urbano, situación que se viene dando desde hace más de dos meses.
Hasta el lugar de la manifestación llegaron representantes provinciales del Sindicato de Camioneros, quienes intentaron mediar para arribar a algún tipo de solución. “Ayer (por el lunes) estuvimos con los compañeros y nuestro secretario gremial se comunicó con la viceintendenta , quien se comprometió a gestionar un encuentro con el intendente”, indicó a El Litoral José Lencinas, miembro de la comisión directiva de ese sindicato. En este sentido agregó que “muchos duermen en los camiones o se quedan en la casa de un compañero que está sobre la ruta, porque si van a su casa su familia tiene que mantenerse aislada 14 días, con lo que eso genera. Entendemos que hay un protocolo que respetar, pero habría que analizar cómo se pueden implementar medidas más flexibles, realizar el test rápido, o ver alguna forma de acortar los tiempos. Un camionero a veces está una semana afuera o más y al volver no puede ver a su familia y a los pocos días tiene que partir nuevamente; esto pasa hace más de dos meses y es una situación desgastante”, sostuvo. “Esperemos tener una reunión lo más pronto posible porque la idea es evitar otro tipo de medidas de fuerza”, finalizó. (AB)