Familiares de Jesús, el niño de dos años que murió por la picadura de un alacrán en la primera semana de diciembre, se manifestaron ayer en Goya. Iniciaron su recorrida desde una de las calles de la ciudad y llegaron al Hospital Camilo Muniagurria. Continuarán con el reclamo la semana que viene y piden justicia.
Los reclamos de la familia son que se acelere el proceso judicial y que las autoridades médicas les den respuestas. La multitud que se congregó frente al hospital donde Jesús fue atendido en Goya, tenía carteles con frases e hicieron hincapié en que lo hacen “para que ningún niño o niña más pase por esto”.
“No tuvimos ninguna respuesta. No salieron a dar la cara y cerraron las puertas por miedo a que entremos”, detalló a El Litoral, Lucía, la mamá del niño.
“Nos dijeron que el director del hospital no estaba dentro, pero yo sé que estaba porque alguien que estaba ahí me lo confirmó”, aseguró.
Lucía señaló que hasta el momento desde la dirección del hospital no se comunicaron con ella y lo que quieren son respuestas.
“La semana que viene vamos a hacer otra marcha, misma hora y mismo lugar”, destacó la mujer. Es decir, en la intersección de las avenidas Mazzanti y Rolón desde las 10.
“Dejaron que mi hijo sufra y se muera. Yo lo veía irse en mis brazos”, dijo entre llantos desesperados a un video para Radio Dos.
Lucía pidió también el acompañamiento de los vecinos de Goya. “Mañana puede ser tu hijo, tu sobrino, tu nieto. Necesitamos a la gente, necesitamos apoyo. Necesitamos que en el hospital atiendan con el corazón o se vayan, por favor”, expresó.
“Me quedé sin mi hijo porque no me creyeron. Acá estamos solo los familiares y conocidos, necesitamos a la gente de Goya para pedir justicia por mi hijo”, expresó.
“El reclamo es que no actuaron como debieron en el centro de salud. No le atendieron en el debido tiempo a mi hijo, fue tarde cuando actuaron. Ellos me sacaron a mi hijo, me lo mataron”, mencionó previamente a este medio.
La familia también pidió que se aceleren los procesos de investigación forense. “Se demoró porque la sangre de mi hijo estaba tan tomada por el veneno del alacrán que no pueden trabajar. Ahora lo están haciendo con su tejido”, explicó.
Jesús Pereyra murió el primer fin de semana de diciembre tras recibir la picadura de un alacrán (Tityus trivittatus). Se inició una investigación judicial por posible mala praxis en el hospital de Goya. Los resultados finales de la autopsia estarán en enero del 2022.
(BDC)