Boris Johnson se ha aferrado a la crisis de Ucrania para revestirse de un manto de estadista que aleje el escándalo de las fiestas en Downing Street. El Reino Unido quiere aumentar de un modo considerable su contribución a la Otan “para reforzar las fronteras de Europa frente a la creciente agresión rusa”, según ha anunciado este sábado Downing Street en un comunicado. Funcionarios británicos acudirán la próxima semana a Bruselas para concretar los detalles de una oferta que incluye duplicar el número de soldados, enviar armamento defensivo a Estonia, y aportar cazas de combate, buques de guerra y especialistas militares para proteger a los países de la Alianza Atlántica.
“Este paquete de medidas enviará un claro mensaje al Kremlin: no toleraremos sus actividades desestabilizadoras y siempre apoyaremos a nuestros aliados de la Otan frente a la hostilidad rusa”, dijo Johnson y añadió que “si el presidente Putin elige la senda de un baño de sangre y destrucción, será una tragedia para Europa”.
(JML)