El dólar subió $40 en lo que va de la semana y se mantiene en los niveles más altos desde la salida del cepo cambiario. Analistas consultados por TN coinciden en que el segundo semestre será más desafiante para el Gobierno en materia cambiaria.
El pago de aguinaldos y la baja renovación de deuda del Tesoro aportaron los pesos necesarios para impulsar el precio de la divisa estadounidense, a la que los minoristas pueden acceder sin restricciones en los bancos.
A ello se sumaron otros ruidos externos, como el conflicto judicial por la expropiación de YPF y un reporte poco constructivo del banco internacional JP Morgan. En ese contexto, los analistas creen que la volatilidad puede hacerse más frecuente en los próximos meses, aunque no esperan saltos bruscos para el dólar.
“La segunda mitad del año va a estar marcada por una mayor volatilidad en el tipo de cambio y será un gran test para el esquema de bandas cambiarias del Banco Central”, indicó Claudio Caprarulo, director de Analytica.
El economista destacó que la caída estacional en la oferta de dólares por parte del campo no será compensada como en 2024, cuando se puso en marcha el blanqueo. “En los últimos tres meses el promedio de suba del dólar oficial fue del 3%, un porcentaje que será mayor en todos los escenarios que estamos trazando para esta segunda mitad del año”, anticipó.
Un semestre desafiante
El Gobierno entró al tercer trimestre sin haber cumplido con la meta de acumulación de reservas acordada con el FMI y encara la parte más difícil del año en el frente externo, ya que la cosecha gruesa quedó atrás.
Aunque Rocío Bisang, economista de Eco Go, sostuvo que la presión alcista sobre la cotización del dólar se podría diluir en los próximos días si no hay ningún fenómeno disruptivo, también reconoció los desafíos que habrá en materia cambiaria.
“Por la propia estacionalidad del campo, debería tender a reducirse la liquidación. Además, las elecciones de octubre pueden generar algo de ruido, no tanto por el resultado en sí, sino por la posibilidad de que se avizoren cambios en la política económica que lleven a que se desarmen posiciones”, explicó.
En la misma sintonía se manifestó Gonzalo Carrera, economista de Equilibra: “En los próximos tres meses, ya sin tanto ingreso de divisas y con el factor electoral, que en general lleva a los agentes a buscar cobertura, el Gobierno va a tener que alinear los incentivos. Probablemente tenga que convalidar mayores tasas, por ejemplo”.
A su turno, Juan Manuel Truffa, socio de Outlier, estimó que el Gobierno transitará los próximos meses haciendo equilibrio entre un tipo de cambio que sube más de lo que se esperaba, pero todavía le permite estar cómodo.
De todos modos, agregó que no ve razones para que la cuestión cambiaria se complique demasiado. “Quizás encontremos un equilibrio entre $1200 y algo más de $1230, como lo que vimos hoy. Es un equilibrio razonable, y todavía falta que entren más dólares del agro”, apuntó.
Para Truffa, el aporte extra del campo, la menor demanda de los aguinaldos y alguna intervención oficial en el dólar futuro ayudarán a mantener al tipo de cambio en relativa calma durante julio.
“Obviamente, que no va a estar exento de presiones porque no hay tanto ingreso de dólares en los próximos meses. Con lo cual, habrá que conseguir algunas otras fuentes que le provean de dólares al Gobierno”, cerró.
Fuente: Infobae.