Luego de las reuniones informativas con los empresarios vendedores de pirotecnia, desde Dirección de Contralor Ambiental de la Comuna informaron que comenzaron a distribuir todo el material sobre la legislación vigente a fin de que los comerciantes cuenten con la información sobre la normativa vigente.
Anticipando las fiestas de fin de año, se pueden observar por doquier los adornos típicos de la Navidad y año nuevo, elementos que siempre estuvieron acompañados por la pirotecnia, pero dado que este va a ser el primer año donde ya rige la ordenanza Nº 6678/2018 de prohibición en la venta de bombas de estruendo y morteros, desde la Dirección de Contralor Ambiental de la Comuna informaron a El Litoral que ya recorren los comercios para dotar de toda la normativa vigente sobre los artículos que se pueden vender y cuáles no.
Y en este marco, donde la campaña apunta al mayor uso de luces y menos estruendo, desde el área de contralos indicaron a El Litoral que “la pirotecnia se mide por el tamaño del cañón del estruendo que es de 2 pulgadas, porque no es lo mismo arrojar un estruendo en un espacio libre como si se lo hace estallar en un lugar cerrado”.
“Los controles empezaron y todos deben respetar la normativa vigente que se sancionó para evitar daños en personas con mayor sensibilidad sensorial, diversos diagnósticos de Trastorno de Espectro Autista (TEA), Trastorno Generalizado del Desarrollo (TGD), ancianos e incluso mascotas”, dijo el funcionario municipal.
Y en relación a la recepción del listado de productos prohibidos dijo que “esta ha sido una norma consensuada con los comerciantes, por lo que no tenemos resistencia y esperemos no tener problemas más adelante con los vendedores ambulantes”.