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El increíble caso de la momia extraterrestre

Por Francisco Villagrán

villagranmail@gmail.com

Especial para El Litoral

Los estudios con rayos X realizados sobre el extraño cuerpo hallado demostraron que tiene dos corazones y dos estómagos y más de 6.000 años de antigüedad. Los sorprendidos arqueólogos dijeron que se trataba de un ser que “no es como nosotros, evidentemente no es de este mundo”. El cuerpo descubierto era oscuro y bronceado, más bien tiene un aspecto metálico, el cráneo es voluminoso y tiene los ojos claros, de color azul, extrañamente abiertos, con una mirada triste, que aún brilla como si tuviera vida. Este extraño cuerpo momificado fue un hallazgo sensacional y se hizo todo lo posible para ocultarlo al mundo. Pero el doctor Lavalliere, uno de los arqueólogos que comandaba la expedición, dijo que no se puede  ocultar al mundo este hecho increíble.

El cuerpo momificado fue sometido a numerosos estudios con rayos X para analizarlo y se descubrió que tenía dos corazones, perfectamente desarrollados y también un par de estómagos, contenidos en una estructura ósea realmente extraña. Ambos gobiernos, el francés (la expedición era francesa) y el israelita decidieron ocultar el increíble hallazgo, clasificándolo como altamente secreto (top secret) y ordenaron a los arqueólogos guardar silencio, como ocurre siempre en estos casos, sobre el descubrimiento de la momia de un posible bebé extraterrestre, como se dio en llamarlo. Sin embargo, el doctor Lavalliere pensó que este hallazgo no debía mantenerse en secreto y habló a la prensa internacional sobre el descubrimiento de un infante momificado de apariencia extraterrestre.

El científico, de 50 años, ignoró las órdenes gubernamentales impuestas al caso, lo cual le significó una dura sanción de varios meses de suspensión en la universidad en la que trabajaba y posteriormente el despido definitivo. Nunca más se supo qué fue de él.

Increíbles detalles

Esta momia de pequeña estatura puede ser la primera prueba tangible de que los extraterrestres ya caminaban sobre nuestro planeta en tiempos remotos. Uno de los científicos que integraba el grupo señaló a la prensa: “Estoy seguro de que este duro y oscuro cuerpo pertenece a una civilización que viajó hasta aquí hace miles de años”. Sus huesos son extremadamente densos pese a la edad que muestra.

Se sospecha que la combinación de piel correosa y la dureza de sus huesos le formaron una especie de capa protectora. Este extraño ser podría ser un humanoide de la Tipología 1, pequeño, que murió hace unos 6.000 años más o menos según los estudios, mucho antes de que la señera figura de Cristo apareciera sobre la Tierra.

El cuerpo fue llevado a un laboratorio y resguardado bajo un fuerte equipo de seguridad e instalado en un cubículo con clima artificial controlado, todo esto en la ciudad de Tel Aviv, donde se supone que aún está. Los investigadores y científicos israelitas han tomado muy en serio su trabajo y analizaron concienzudamente y en detalle al niño espacial. Los ufólogos están interesados en el descubrimiento de Lavalliere, ya que, según ellos, esto certifica las miles de leyendas y testimonios de visitantes espaciales y extraterrestres que llegaban del cielo y que la misteriosa momia es la única evidencia hasta ahora, que puede ser tocada y analizada y que además comprueba que esas leyendas pueden tener mucho de realidad.

En tanto, los expertos de ambos países trataban de determinar si la muerte de este ser sobrevino a consecuencia de un accidente de su nave espacial. Un investigador de Nueva York afirmó que esto es mucho más de lo que esperábamos encontrar, es sencillamente fantástico. Esta momia es probablemente un extraterrestre fosilizado al que nosotros hemos llamado “bebé” pero, ¿quién está realmente seguro de que el cadáver es de un niño, o es un adulto de una raza pigmea ya desaparecida? O quizás fue un extraterrestre que murió en una misión espacial. Todo puede ser en el campo de las hipótesis y conjeturas.

Un poco más atrás en el tiempo, en 1961, fue descubierta y recuperada una momia alienígena, por la KGB, servicio secreto de la Unión Soviética, en una expedición que formaba parte del Proyecto Isis. Según reportes y material de video auténtico, este antiguo astronauta alienígena momificado fue encontrado en la meseta de Giza, Egipto y luego llevado a Rusia, como parte de un proyecto secreto militar.

De acuerdo a cálculos, la momia tendría unos 13.000 años. La expedición secreta soviética tenía como objetivo estudiar la llamada “Tumba del dios visitante”. Los rusos ya conocían la investigación Alien que llevaba a cabo EE.UU., así como el Area 51. Ahora, después de mucho tiempo, se sabe que la momia encontrada en Egipto en 1961 era de una criatura alienígena que murió en Egipto 10.000 años antes de Cristo. También se hallaron unas 15 cajas de extraños elementos que fueron llevadas para su estudio a la Unión Soviética. Nunca se informó de los resultados. Finalmente digamos que la cultura egipcia es la pionera en cuanto a momias se refiere y en este sentido, el destacado escritor e investigador Eugenio Dayans en su libro “Los visitantes del cielo”, habla justamente de la manera en que los egipcios preparaban a sus muertos.

“Primitivamente los egipcios, cuenta, no eran enterrados, sino que sus cuerpos, como los de los reyes muertos, eran abandonados en las dunas del desierto con el objeto de que el aire caldeado y las ardientes arenas ejercieran sobre los cadáveres, así expuestos al sol y al frío de la noche, un proceso de preservación de la corruptibilidad y produciendo en ellos una momificación natural.

Una de las leyendas egipcias cuenta que en una ocasión descendió del cielo un barco volador y se llevó uno de los cuerpos de aquella necrópolis.  A veces la leyenda se mezcla con la realidad y no se sabe cuál parte es cierta y cual no. 

 Concretamente los científicos opinan que dos corazones, dos estómagos y un cráneo voluminoso, son suficientes elementos para creer que se trata de una momia de un ser de otro mundo. Y de ser así, ¿era el único de su especie o había otros diseminados en la zona? Todas estas preguntas no tienen una respuesta firme. Lo único real y concreto es que los científicos descubrieron y tienen en su poder el cadáver momificado de un ser que nada tiene que ver con la contextura orgánica de la raza humana.

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