Miércoles 08de Mayo de 2024CORRIENTES32°Pronóstico Extendido

Dolar Compra:$859,5

Dolar Venta:$899,5

Miércoles 08de Mayo de 2024CORRIENTES32°Pronóstico Extendido

Dolar Compra:$859,5

Dolar Venta:$899,5

/Ellitoral.com.ar/ Vivir Bien

Soy inseguro, ¿qué hago?

Somos testigos hoy de muchas personas que se mueven por la vida con inseguridad, que no confían en sí mismas y rara vez logran accionar para crecer y avanzar. Te invito a analizar los rasgos principales de un individuo que se maneja con ciertas pautas de inseguridad.  

Por Bernardo Stamateas

Colaboración especial

1. Alambra su territorio personal

En realidad, coloca un “cerco electrificado” alrededor de su espacio y no permite que nadie le diga nada. No acepta sugerencias ni aportes y defiende lo que cree que es suyo y otros le quieren quitar. Hay gente que alambra su trabajo, o a su pareja, familia y/o amigos, y los cuidan con uñas y dientes.

2. Procura encontrar símbolos externos que lo hagan sentir bien

Buscar cosas de marca, puestos o títulos, para exhibirlos y sentirse mejor, habla de inseguridad. Esto es lo que hacen, por ejemplo, los padres que se jactan de que sus hijos van a determinado colegio privado; o los varones que se reúnen a compartir un café para mostrar sus aventuras. El inseguro se desvive por mostrar lo que tiene y lo que hace porque así siente que es superior al resto.

3. Maltrata a los demás, es violento

Aquel que grita, golpea, amenaza, presiona, insulta, mandonea, impone, y otras acciones por el estilo, está demostrando su falta de recursos internos para manejar las situaciones complicadas con los demás. En el fondo, se trata de una persona mentalmente rígida que solo ve las circunstancias desde su punto de vista y se niega a escuchar a otros.

4. Se siente intimidado frente a gente segura

Lo que más incomoda a alguien inseguro es… ¡otro ser humano seguro de sí mismo! Esto es así porque se siente superado, cuestionado, amenazado. No lo puede tolerar porque deja en evidencia su propia inseguridad y falta de límites. Entonces vivirá pendiente de lo que el otro hace o dice, y será rápido para atacarlo cuando encuentre una falla. 

Cuando somos emocionalmente seguros, cuando disfrutamos de una autoestima elevada, podemos ocupar tanto el lugar de “rey o reina”, como el de “siervo o sierva”. No somos individualistas y jamás nos sentiremos disminuidos por otros. ¿Por qué? Porque sabemos quiénes somos y cuánto valemos, más allá de nuestras posesiones y acciones.

5. Un ser humano seguro está parado en su identidad

Como consecuencia, sabe que no precisa tener ni hacer para saber quién es y lo que vale. ¿Sabés quién sos? Cuando sabemos quiénes somos, no necesitamos demostrar nada. Hagan lo que hagan los demás y suceda lo que suceda a nuestro alrededor. Solo alguien seguro de sí mismo puede ser verdaderamente libre para elegir sus propios sueños. Y soñar aun en tiempos de crisis. Porque su seguridad lo habilita para saber dónde y cómo está parado, con la certeza de que él o ella no es su rol ni nada externo que pueda tener. Entonces, si pierde algo, no sufre innecesariamente porque sabe en su interior que posee el potencial infinito para recuperarlo con creces. Alguien seguro simplemente, es feliz a cada momento.

¿Te gustó la nota?

Ocurrió un error