El secretario de Derechos Humanos de la Nación, Horacio Pietragalla Corti, estuvo de visita en la provincia de Corrientes y se reunió con familiares y víctimas de violencia institucional de la provincia, entre ellos, familiares de Lauraro Rosé, el joven de 18 años que murió ahogado en el río Paraná en medio de un operativo policial en playa Arazaty.
Al encuentro asistió uno de los hermanos de Lautaro en compañía del abogado Hermindo González. Hablaron del avance de la causa en la que se encuentran imputados 11 policías por abandono de persona seguido de muerte y también por apremios ilegales.
Pietragalla Corti se puso a disposición de los familiares de Lautaro para el esclarecimiento del caso.
En la causa ya declararon ante el fiscal Gustavo Robineau más de 12 personas, entre ellos, policías que no están imputados, pero que sí estuvieron en el lugar en patrulleros.
Fueron citados como testigos la madre de Lautaro, Juana Luz Sotelo, y su hermano Matías Rosé, que fue quien encontró las zapatillas de Lautaro un día antes de que apareciera su cuerpo sin vida en el Paraná, a la altura del barrio Virgen de los Dolores, el 10 de noviembre.
La madrugada del lunes 8 Lautaro estaba con un amigo, menor de edad, a quien la Policía golpeó.
Ese joven se convirtió en un importante testigo y las autoridades judiciales y de la fiscalía, en conjunto con el abogado querellante, están en comunicación con uno de los programas nacionales de asistencia. Pero no prestará declaración testimonial hasta que no reciba apoyo psicológico.
También declaró otro de los hermanos y uno de sus tíos.
Los oficiales acusados pertenecen al GIR (Grupo de Intervención Rápida), al Grim (Grupo de Respuesta Inmediata Motorizado) y a la Comisaría 12ª. En la causa interviene el Juzgado de Instrucción Nº 3 de la ciudad de Corrientes, a cargo de Josefina González Cabañas. A pesar de los pedidos de la querella para que se les dicte prisión preventiva a los imputados, todos siguen en libertad.
(NG)