Los tres puntos de local le siguen resultando esquivos a Boca Unidos. Después de dos empates consecutivos sin goles en su cancha, cayó 3-2 sobre el final del juego frente a Sportivo Belgrano de San Francisco, acumula así la segunda derrota consecutiva en el torneo Federal A.
Ya sin la dupla Fabro-Baroni, y con Roberto Marioni como técnico interino, el Aurirrojo mostró el sábado dos caras totalmente opuestas. El equipo fue ofensivo, se amigó con la pelota, la hizo circular con criterio, y creó chances de gol frente al arco rival. Sin embargo, falló en el retroceso las veces que perdió la tenencia, y cometió errores defensivos imperdonables que le costaron la derrota.
El comienzo fue inmejorable. Una “avivada” de Gabi Morales, que hizo rápido un lateral ofensivo para López, lo puso adelante 1-0 con un sorpresivo remate de zurda del lateral que se metió arriba, contra el segundo parante del arco defendido por Quinteros.
El local tuvo incluso oportunidades para aumentar, aunque falló en la definición, y en una ráfaga, el equipo del interior cordobés lo dio vuelta, aprovechando la fragilidad defensiva del Aurirrojo.
Fue un volver a empezar para Boca Unidos, que siguió merodeando el área rival y llegó al empate después de una pelota que le quedó a Gabi Morales tras un rebote en el área. El rosarino estuvo incluso cerca del tercero, pero un defensor rival salvó en la línea tras un mano a mano con Quinteros.
En el complemento siguió mejor el equipo correntino, aunque comenzó a sentir el esfuerzo realizado en la primera mitad. No obstante, tuvo un par de situaciones para desequilibrar, pero volvió a fallar en la definición.
Sportivo Belgrano, que en todo el encuentro estuvo agazapado esperando el error del rival, aprovechó en tiempo de descuento una pelota perdida en la mitad de la cancha para lastimar de contraaque y quedarse con un triunfo muy celebrado y para el que hizo méritos, exclusivamente, por la gran efectividad demostrada.
A Boca Unidos le faltó definición, no liquidó el encuentro cuando tuvo sus oportunidades, y si bien mejoró mucho de mitad de cancha hacia adelante con la pelota en los pies, sigue cometiendo fallas en el retroceso cada vez que la pierde que le costaron muy caro.
(RP)