Morena Nazareth Lavin Vergara (13) fue encontrada muerta este martes en su casa en Zárate, luego de que su madrastra, María Ludueña, llamara al 911 diciendo que la nena no respiraba. Finalmente, la mujer confesó que le había matado con un palo: “Se me fue la mano”.
“La detenida le pegó tanto que la adolescente terminó con hemorragia y politraumatismos”, explicó una fuente judicial del caso. Y aclaró que el motivo del crimen se debió a los “celos” que le tenía a la nena por un supuesto trato distinto del hombre hacia otra hija, que la pareja tiene en común.
El papá de la víctima, Pablo Ramón Lavin (42), declaró también este viernes. Confirmó que cuando llegó a su casa ubicada en la calle 16 al 100, en Lima, una localidad en el norte bonaerense, su pareja le dijo que le había introducido a Morena un palo en la zona baja. Por eso, la autopsia comprobó signos compatibles con una violación.
A su vez, en la audiencia declaró que era inocente porque no estuvo presente al momento del crimen. Se había ido de su casa al trabajo a las 5 horas y llegó luego del arribo de la Policía y la ambulancia. Asimismo, admitió que si bien hace “sacrificios” con animales al profesar la religión umbanda, “nunca” le haría daño a su hija. Fuentes judiciales sostienen que la mujer no parece mentir y que la declaración que hizo hace cuadrar el caso. Los investigadores aseguraron que no había denuncias previas de alguna agresión sobre la víctima y confirmaron que había denuncias recíprocas entre la pareja por “amenazas y violencia familiar”.
Las hijas menores de edad del matrimonio quedaron bajo el cuidado del Servicio Local y el Departamento de Asistencia a la Víctima del municipio de Zárate.
(JML)