El Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional Nº 3 de Capital Federal condenó este jueves a tres años y tres meses de prisión al abogado Alejandro Sánchez Kalbermatten y lo inhabilitó para ejercer la profesión por el doble de tiempo de la pena por un intento de chantaje al empresario Sebastián Eskenazi ocurrido en diciembre de 2017.
En un veredicto de cuatro carillas, el tribunal, que integra de manera unipersonal el juez Julio Báez, decidió que el abogado condenado mantenga la libertad hasta que la sentencia quede firme. Además, informó que la lectura de los fundamentos será el próximo 10 de agosto.
En la causa por el intento de extorsión a Eskenazi, referente del Grupo Petersen, también estuvieron acusados Pablo Brugo y Juan Manuel Ducler, hijo del fallecido financista Aldo Ducler, aunque estos dos fueron beneficiados con sendas probation. Sin embargo, Sánchez Kalbermatten ya había recibido anteriormente esa concesión y debió afrontar el juicio.
El inicio de la causa se remonta a noviembre de 2017, cuando en las oficinas porteñas ubicadas en Cerrito 740, muy cerca del Obelisco, Brugo acudió en nombre de Ducler y Sánchez Kabelmatter. Allí anotició al empresario Eskenazi sobre el por qué del asunto: la repercusión que podía tener la divulgación de la información que tenían y que era dañina para el Grupo Petersen. Luego, se hizo alusión a la necesidad de que mostraran una “luz” o “una reserva” como un gesto de buena voluntad. Hubo dos cónclaves más donde le decían que recibían presiones desde distintos sectores políticos para difundir la información. El último contacto antes del operativo que puso fin a todo fue el 12 de diciembre de 2017.