“Yo nunca voy a renunciar a ser gobernador de la provincia, pero nunca voy a poner por delante un deseo personal”, dijo el exintendente entrevistado en Final Abierto. También mandó un mensaje: “Nadie me condiciona, porque nadie me va a decir lo que tengo que hacer o decir”. Y el final de este análisis es todavía más inquietante: “De acá a las elecciones, pueden pasar muchas cosas”.