EL DATO
Los vecinos aseguran que no es el primer caso de violación. Mencionan a una chica de 14 años que quedó embarazada y también a otra nena de 6 años que vive a la vuelta de la Comisaría. La venta de droga es otro motivo de preocupación.
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La conmoción social que causó en Empedrado el brutal homicidio de una nena de once años, Romina Gutierrez, desencadenó una medida disciplinaria de la Jefatura de Policía en la comisaría de la localidad que aparecía cuestionada por la falta de acción en el caso. La gente dice que los uniformados fueron indolentes ante la denuncia de la madre de la chiquita cuando dio aviso de su desaparición.
Al descubrirse el funesto descenlace (Romina fue encontrada estrangulada y presuntamente violada) los vecinos de Empedrado salieron a reclamar la remoción de la cúpula policial local. Ayer asumió un nuevo jefe en la Comisaría.
Orlando Galarza, proveniente de la Unidad Regional VII se hizo cargo de la seccional. Reemplazó a Osmar Acosta que fue pasado a disponibilidad. Además la Jefatura ordenó el traslado de tres oficiales y cinco suboficiales que -se especula- estuvieron de guardia el día que la mamá de Romina acudió en busca de ayuda.
La nena fue vista con vida en la plaza principal de Empedrado el miércoles de la semana pasada. Al día siguiente -el jueves- la mujer denunció que su hija había regresado al hogar. Aparentemente, de acuerdo a la denuncia de la familia, no se hizo nada. Romina fue encontrada muerta el viernes a las 18 en un descampado cerca de la Ruta Nacional 12.
Desde hace cinco días Empedrado vive en estado de convulsión. El crimen destapó el descontento social por la falta de seguridad. Todas las miradas apuntan a la Comisaría local y ni la presencia de la subsecretaria de Seguridad de la Provincia, Cecilia Gortari ni el jefe de la Policía, comisario general Rodolfo Victorio Fernández lograron aplacar la preocupación.
Ayer la Jefatura puso en funciones al nuevo titular de la Comisaría de Empedrado. Galarza pidió a los vecinos que aporten datos para esclarecer el caso Romina, anunció que ya se encuentra trabajando un equipo forense y dijo que hay cuatro detenidos. (Ver página 26)
En sus primeras horas al frente de la Comisaría, Galarza buscó morigerar la preocupación social.
El recambio de autoridades en la seccional policial se hizo sin anuncio público. Oficialmente no se informó del alejamiento de Osmar Acosta y el traslado de ocho efectivos. La noticia llegó a los medios por vías ajenas a la Jefatura. (Ver recuadro)
Aunque el martes, en una reunión que mantuvo con los pobladores, Cecilia Gortari señaló que la prioridad no era remover al comisiario sino esclarecer el crimen, evidentemente la decisión de cambiar la cúpula policial estaba tomada. Ayer, pocas horas después de que las autoridades provinciales visitaran Empedrado, se produjo la purga.
La decisión de la Jefatura de Policía supone que el reclamo vecinal era razonable. Los uniformados no habían actuado como corresponde.
El jefe de la repartición, Rodolfo Victorio Fernández se limitó a señalar ante la prensa que habían iniciado una investigación para determinar las responsabilidades que le cabrían a los efectivos cuestionado por “inacción o falta de compromiso”.
En declaraciones a FM Total, informó que se designó a Orlando Galarza, se pasó a disponibilidad a Acosta y se ordenó el traslado de ocho efectivos a la Unidad Regional con asiento en Saladas.
En relación al crimen de la nena, Fernandez dijo que hay varios detenidos y se prosigue con la investigación para dar con los culpables. No obstante el Jefe de la Policía aclaró que lo sucedido no es sólo responsabilidad de la Policía sino también de la familia que al parecer consentía que la niña saliera y deambulara hasta altas horas de la noche.
En ese sentido, en dialogo con FM Total, Fernández insistió con que hay una problemática compleja, de tipo socio-cultural en Empedrado. “Evidentemente esta localidad ha sido víctima de vicios que no son propios de la tranquilidad que debe caracterizar a una población pequeña”, advirtió el jefe policial. Señaló que es necesario trabajar en forma conjunta entre las instituciones y la comunidad.
Ayer a la tarde, policías y vecinos mantuvieron un nuevo encuentro para avanzar en la diagramación de acciones para frenar la ola de inseguridad que vive la villa turística ubicada sobre la costa del río Paraná. Según la denuncia de los pobladores no es este el primer caso de violación.
Una mujer, Zulma López, docente y vecina de la familia de Romina Gutierrez dijo a FM La Red que se produjeron otros ataques a menores que no fueron investigados por la Policía y los responsables andan sueltos.