El último barrio en ordenarse es el complejo habitacional de las 500 viviendas conocido como Ponce Nuevo. Por ordenanza fue reglamentada su denominación este año como Cristina Kirchner. Otro de los flamantes barrios es el Néstor Kirchner.
LOS NUMEROS
1611/85 es la ordenanza que reglamenta el nombre del barrio 9 de Julio, más conocido como Laguna Seca. La mayoría de las barriadas se ordenó en 1972.
Se lo conoce comúnmente como Laguna Seca, sin embargo, la legalidad le dictaminó dos nombres que no mantienen plena vigencia en la jerga vecinal: República de Venezuela (Ordenanza Nº 1173/82) y 9 de Julio (Ordenanza Nº 1611/85). Ambos complejos habitacionales forman parte de decenas de barrios cuyas denominaciones distan del bautismo popular.
Si bien el Laguna Seca es uno de los barrios más populosos, y conforma el circuito electoral más grande de la provincia (allí se pueden definir comicios) en los papeles su denominación no existe.
La barriada con más de 25 mil electores nació en los albores de los ‘80 con la construcción de 244 viviendas. En ese entonces se posicionaba en una zona considerada suburbana.
Una antigua calle de tierra llamada Juan Domingo Perón comunicaba el complejo con el resto de la ciudad, hasta la pavimentación de la avenida Cazadores Correntinos, actualmente con salida a Ruta Nacional Nº 12.
A mediados de dicha década, se erigieron unas 300 unidades habitacionales más. Algunos de los programas se ejecutaron para brindar un techo a los vecinos que se asentaban en la zona conocida como La Olla.
El Laguna Seca se convirtió en uno de los grandes complejos que dieron forma al ejido urbano. Junto a las Mil Vivien-das y el barrio Güemes (Nuevo). Lejos quedaron esos días de periurbanismo. Hoy proliferan las huellas de la ciudad. Cuenta con un centro comercial, una sede de la caja municipal y del banco de Corrientes, así como el primer centro digital del Registro Civil.
Barrios
El Laguna Seca no es la única barriada cuyo nombre no está formalizado. Las Mil Viviendas, por ejemplo, no posee una ordenanza que la denomine como tal, sino que está compuesta por una serie de complejos habitacionales con ordenamiento territorial. Estos son el General San Martín, Mal-vinas Argentinas, Cristóbal Colón y Doctor Nicolini.
Otro de los barrios sin denominación formal pero con bautismo popular es el Quilmes, ubicado en cercanías de la cervecería; el complejo habitacional Docente (en inmediaciones del Molina Punta); y Jardín (cuyas calles remiten a flores). Así como Caridi, cuyo nombre deriva de la escuela especial ubicada en el Galván.
De igual modo sucede con el Trujillo, así como Santa Lu-cía, Lomas, Loma Alta (zona del 17 de Agosto). También el Santa Catalina, que nació luego de la ocupación de parte de un predio del Ejército Argentino.
Rodeado por la avenida Medrano, La Olla es uno de los asentamientos más antiguos. Así se denomina una de las áreas que comprende parte de los barrios Ongay, Serantes, San Jorge, Paloma de la Paz y San Jorge.
Ordenamiento
El ordenamiento tiene como motivo “gestionar servicios para la mejorar la calidad de vida de los vecinos”, expresó a El Litoral la directora de Comisiones Vecinales de la Mu-nicipalidad de Corrientes, Soledad Pérez.
En total hay 111 barrios con ordenanza municipal y existen 220 procomisiones vecinales que bregan por un ordenamiento. Este, además, no sólo refiere a mejoras en prestaciones municipales, también para provinciales y nacionales.