A una semana de Nochebuena, los puesteros afectados por el incendio del galpón en abril se muestran preocupados por la escasa demanda y buscan alternativas para mejorar las ventas. Una de las opciones que comenzaron a analizar es la de aceptar tarjetas de crédito y débito como forma de pago, a pesar de algunas complicaciones que pueda representar el mecanismo.
En diálogo con El Litoral, uno de los comerciantes comentó que “esta semana vamos a informarnos bien sobre cómo es el tema; puede ser una buena herramienta teniendo en cuenta la situación económica”. De esta manera, a pesar de algunos cargos extra y de no tratarse de dinero en efectivo en el momento, varios de los feriantes ven con buenos ojos la incorporación del sistema a través de tarjetas.
“Estamos esperando que se active esta semana que ya llega Navidad, pero por el momento es muy poco lo que mejoró”, señaló preocupado uno de los puesteros. Asimismo, comparó: “Si tenemos en cuenta esta época del año, desde el 2015 nuestras ventas bajaron cerca de un 50%”.
En tanto, un comerciantes expresó al respecto: “Mucha gente ahora compra con tarjeta y nosotros no contamos con ese mecanismo, por eso veremos si todos están de acuerdo para gestionar en el corto plazo esa forma de cobro”.
Además, disminuyó la cantidad de clientes que se acercaron a comprar durante noviembre, un mes que solía representar una leve mejora en la demanda. “Para las cenas de egresados y recepciones vendíamos un poco más, pero este año prácticamente no notamos la diferencia”, señalaron desde los puestos.
Por otra parte, además de la situación económica en general y de una marcada merma en el consumo en todos los rubros, aseguran que el incendio y su posterior traslado a las carpas de la plaza del Mercosur generaron dificultades.
Mercadería
Tras recibir el segundo crédito de $10 mil hace algunos días, la mayoría de los comerciantes decidió viajar a Buenos Aires a comprar mercadería y así renovar el stock de cara a las fiestas.
Con destino a Flores o a Once, el pasaje les cuesta cerca de $1.500, por lo que el resto utilizaron para comprar indumentaria y calzados, entre otros productos que comercializan allí en las carpas.
Los aumentos de precios en los lugares que visitan es otro de los puntos de preocupación de los feriantes, ya que en varios rubros se dieron incrementos en los últimos meses. De igual modo, para que la demanda en los puestos no baje aún más, la mayoría evita subir el costo de la mercadería, aunque esto signifique achicar considerablemente su margen de ganancia.
Carpas
Los 109 puesteros permanecen hace varios meses en las carpas de la plaza del Mercosur, montadas especialmente por parte del Municipio. Además de las complicaciones que tuvieron con las lluvias, la estructura se dañó y ellos mismos improvisaron algunos arreglos.
Según comentaron, algunos hierros que sostienen la lona están doblados y la carpa propiamente dicha se abrió en un sector, por lo que los puesteros la volvieron a sujetar con precintos plásticos. Además, uno de los feriantes advirtió que “una de las carpas no está fija en el suelo y tenemos miedo de que un viento fuerte pueda ocasionar problemas”.
En cuanto a la infraestructura también genera malestar la limpieza de los baños químicos, que al igual que el mantenimiento de las carpas, depende del que alquila a la Comuna.
“Tendrían que venir una vez por semana a limpiar, pero se retrasan uno o dos días y en un mes y medio terminan viniendo cuatro veces en vez de cinco”, advirtió uno de los puesteros.
Mientras tanto, a la espera de mejores ventas, aguardan también la construcción del paseo de compras que estará en el San Gerónimo, frente a la Casa del Bicentenario. La obra, de acuerdo a los plazos previstos, estaría terminada en agosto y recién para esa fecha se podrían mudar al nuevo edificio.