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En vuelo sobre pastizales, el gavilán planeador

Hiende el ambiente y es fácil verlo. En las imágenes aquí observamos un plano general de esta ave que recorre los paisajes húmedos y verdes. Además, hablamos en esta ocasión con la arquitecta Pilar Salas sobre el legado que dejó Andrés Salas. Una enciclopedia sobre el hábitat y la identidad de Corrientes. 

Por El Litoral

Domingo, 10 de noviembre de 2019 a las 01:04

Por Paulo Ferreyra
Colaboración: Abel Fleita
Especial para El Litoral

Gavilán planeador (Circus buffoni) Esta especie es común en zonas de pastizales, campos y áreas palustres. Se alimenta de pequeños vertebrados, en especial de roedores o pequeñas aves. Se lo suele ver planeando lentamente en busca de presas. El macho alcanza a medir 50 centímetros en tanto que la hembra un poco más, 55 centímetros. El plumaje de su cuerpo es negro en la espalda y la cabeza, incluyendo el cuello; resto del vientre y cara son blancos. La cola es blanca con un grueso barrado negro, más fino en la parte ventral de las alas. Sus patas son largas y amarillas. Las hembras y juveniles son de color marrón, con el pecho blanco estriado de canela. Algunos ejemplares presentan una coloración oscura, denominada fase negra, donde el plumaje es casi todo negro, conservando el barrado de cola y alas y el blanco de la cara, en esta fase en complicado diferenciar los sexos. 

Fotografía
Un plano general imaginario recorre los paisajes húmedos y verdes. La corriente del agua es apenas perceptible. Solo delatan el movimiento líquido las innumerables estrellas plateadas que nacen de la luz del sol. Sobre ella agita sus alas el gavilán planeador, que aprovecha la leve brisa y se traslada luego hacia el pastizal dorado. 
La atracción entre vegetación y ave no se aleja más allá de los cinco metros y por momentos, el gavilán se sumerge de lleno al pajonal, tras la presa. En el aire se oyen vocalizaciones de otras aves, alguna cerca y otras lejanas. Benteveos, pecho amarillo e inambúes. 
El gavilán planeador sigue activo y su mundo es único e indiferente, aunque pronto los más pequeños se mostrarán alertas y harán de todo por alejarlo. 
Las imágenes que hoy nos acompañan son de esas tardes que al llegar al campo nos sorprendemos con su vuelo, lento pero persistente aleteo y su ala delta. Al ubicarnos en un determinado lugar, sentimos su paso cercano y vemos su cara negra mate con la línea blanca, como un collar. Las manos amarillas emergiendo del cuerpo blanco y la cola blanca barrada de negro, generan el suspiro de la tarde. Otro día, luego de la lluvia parecerá que vemos una nueva especie, de iguales características, pero de cuerpo oscuro, que se torna azul con el sol. Habrá que prestar suficiente atención porque podrá ser una hembra o su fase oscura sobrevolando el pastizal. 

Hábitat
El gavilán es propio de la zona de pastizales. Forma parte de esa identidad que también hace a las aves propias de esta región. El arquitecto Andrés Salas, nacido en Buenos Aires describió como pocos la identidad de Corrientes. Realizó publicaciones sobre artesanías, leyendas, mitos, arquitectura, Itatí, hospital San Francisco de Asís, entre otros temas.  Dejó un legado inmenso y palpable en varios libros. 
Salas recorrió casi toda la provincia. Trabajó mucho como arquitecto en casi todo el suelo correntino. En cada viaje que hacía el trataba de descubrir cosas nuevas sobre todo con la gente de la construcción. Primero trabajó de lleno como arquitecto y poco a poco comenzó a investigar y describir muchos aspectos que constituyen la identidad de este pueblo. 
En sus trabajos es describió cómo en este suelo se construyen viviendas amigables con el medio ambiente y su entono. “Él conoció de cerca las construcciones de las viviendas. Cuando fue el cuarto centenario de la ciudad hizo un relevamiento de los artesanos. En esa investigación revela que las artesanías constituyen un mundo mayor, no era solo la matera, el mate, la bombilla, el trabajo con el espartillo, sino que eso conformaba un universo rural o semirrural muy grande.
El trabajo del hábitat se entiende como una gran artesanía. Así lo entiendo porque hay un trabajo muy delicado en la elección de los troncos de los árboles para hacer la estructura de la casa, con el barro, con el barro mezclado con el espartillo, con aserrín o con la liga que encuentren”, explica hoy la arquitecta Pilar Salas, su hija con quien repasamos en estas líneas parte del legado que nos dejó Andrés Salas. 
“Papá describía el hábitat. A él le llamaba la atención esa forma de armar el espacio del hogar que es diferente, hay un conjunto de espacios que están separados -uno los ve como sueltos en el terreno-, pero todos esos espacios tienen una vinculación excepcional.
Los habitantes tienen un conocimiento heredados que indica hacía que viento poner el baño, la cocina, dónde poner algo para aprovechar el sol del día, todo lo que se hace para hacer confortable un hogar en ocasiones sin electricidad”, explica.  
El encadenamiento de conocimiento le permitió entrar en el universo de la identidad. Primero la constitución de la forma de las casas y ahí descubrir que estas siempre tienen un altar, de la virgen o del gauchito. El altar es parte del hábitat.
“Hay algo que en arquitectura se llama invariantes, un término que viene de la matemática. Son elementos que no varían, pero que se conjugan de manera diferentes. Así el empieza a definir y rescatar esas invariantes en la arquitectura local. Muchos conceptos y temas que están en el mundo teórico o intelectual los trata de explicar a partir de lo que hacen los habitantes de esta tierra. Están las invariantes, la tipología, el uso del espacio, el subrayaba siempre el uso del espacio intermedio. Por ejemplo, hay un espacio A, un espacio abierto y un espacio C que es el espacio cerrado. En nuestra región el rescataba que aquí se encontraba el espacio intermedio, que es el espacio de las galerías -espacios semicubiertos-, el lugar de la matera o donde se come, es el espacio importante donde transcurre gran parte de la vida de un hogar. Todos buscamos ese espacio intermedio libre. Esto nos identifica mucho en la región litoral”, subraya Pilar al quien que explica que en otras regiones están mucho más signadas por el espacio cerrado, por ejemplo, por cuestiones climáticas. 

Corrientes, tradición, folklore y patrimonio
Este es el título del último libro que realizó el arquitecto Andrés Salas junto al profesor Enrique Piñeyro. Ahí gran parte de sus investigaciones desde la década del 80. Se encuentran ahí material sobre religiosidad, comida, medicina, “hizo una síntesis y lo sumó todo el conocimiento que desde adentro tiene Enrique Piñeyro. Papá sostenía esa mirada desde afuera y Piñeyro sumaba su ser correntino, nacido y criado en el interior de Corrientes. Dos miradas que se enriquecen y potencian en el libro”, agrega Pilar. 
Si bien su profesión era arquitecto después se fue ampliando a otro horizonte como incansable curioso que era. Una de sus últimas investigaciones y registros fue sobre La Mansión de Invierno de Empedrado. Esas fotos están en el libro. 

Techos de paja 
El currículum y las actividades desarrollas por el arquitecto Salas en su vida es imposible resumirlas y ponerlas todas en valor en una página. Si podemos resaltar algunos aspectos. Salas no solo se interesó por la construcción de vivienda en Corrientes, de conocer y estudiar cómo hacían sus viviendas, sino también que él hizo varias viviendas con un diseño amigable y en sintonía en el entorno, con el medio ambiente. 
“A él le interesaba esa arquitectura sin arquitecto. Cómo la gente construía sus casas de una forma que le resultaba confortable, fresca, amigable con el ambiente. El techo de paja, por ejemplo, en Uruguay es glamoroso tenés una casa con techo de paja y en cambio aquí se ve con desprecio.
En algunas casas que hizo, puso techo de paja. Él investigaba mucho. En arquitectura te puede gustar algo, pero después tenés que saber hacerlo pues una casa es importante ya que constituye el cobijo de una familia”, subraya Pilar mientras no oculta emoción, su cariño, su admiración por recordar a su padre y también a su madre, de quien seguramente en otra oportunidad abordaremos en esta ventana. 

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