Calidad, rusticidad y mansedumbre en otro gran remate de Criollos Correntinos

Con una gran convocatoria en el predio de la Sociedad Rural de Corrientes, el pasado viernes se llevó a cabo el 8° remate de Criollos Correntinos, un evento que todos los años en noviembre convoca a los amantes de esta raza equina, y al público que busca caballos para trabajo, deporte y esparcimiento. Con mucha agilidad y buenos valores, se vendieron unos 35 animales, todos nacidos y criados en campos de Corrientes.

Con la organización y comercialización a cargo de la firma Brian Farrell e Hijos SRL, las cabañas San Vicente, El Rosario, El Jarro, San Ramón y El Yaguarí volvieron a poner sus caballos Criollos en la pista, para una subasta convertida en un clásico para la raza. Para este octavo remate conjunto, las cabañas prepararon una gran mayoría de yeguas, y algunos padrillos y castrados montados.

Como es habitual, el martillo estuvo en manos de Nicolás Canessa y Hernán Vassallo, secundados por Agustín Farrell, de la firma consignataria. Previo a las ventas, hubo un emotivo reconocimiento para Julio César Colombo, fallecido hace algunos meses, quien fue muy cercano a cada uno de los protagonistas y uno de los ideólogos de este remate.

Como lo hacen habitualmente, la venta fue en 15 cuotas, con un descuento del 30% por pago contado, y se remató el valor de la cuota. “Consideramos que este remate sin venta en cuotas sería inviable, por eso seguimos apostando a este sistema, más allá de la situación financiera del país”, explicó Agustín Farrell, referente de la firma consignataria.

El desarrollo de la venta fue ágil, desde la primera yegua hasta el último montado castrado, pasando por los padrillos que pusieron las cabañas en la pista. “Los precios fueron muy buenos, muy por encima de lo que se vendió el año pasado”, explicó Farrell.

Una particularidad del remate fue la gran variedad de pelajes de los productos, y que casi todo lo que salió a pista fue montado. “Priorizamos traer todos animales mansos, una de las características de este remate y de la raza Criolla es la mansedumbre de los animales, y eso el comprador lo sabe reconocer”, explicó Maximiliano Mantilla, titular de la cabaña San Vicente, que desde sus campos en el Centro de la provincia trajo a Riachuelo varios ejemplares.

Mantilla consideró que “los precios fueron buenos, el promedio de las hembras quedó bien, y era la categoría que más animales había; después nosotros vendimos un padrillo en $24 mil la cuota, y los montados anduvieron bien; así que estamos conformes”.

El criador explicó que una de las ideas de las cabañas cuando se inició este remate fue la de sumar a más criadores en la raza. Y sobre esta cuestión, explicó que “en la franja de la Ruta Nacional 12 y la Ruta Provincial 5, en Corrientes, tenemos varios productores que son clientes de este remate y que se sumaron a la raza; así que en parte se cumplió ese objetivo”.

Por su parte, José Amadeo Lastra, de cabaña El Jarro, comentó que “todos los años viene mucha gente al remate, y eso responde a la pasión que tiene la gente por el caballo, y en este caso por el Criollo; la venta fue muy buena, muy ágil, y creo que los compradores supieron apreciar lo que trajimos y pusimos en pista”.

En este caso, Lastra destacó que “este remate tiene caballos muy rústicos, criados en campos difíciles de Corrientes; y eso la gente lo valora y sabe que la adaptación va a ser buena”.

Pensando en Criollos Correntinos 2020, las cabañas y la firma consignataria ya trabajan con vistas a su próximo remate, pero en el medio tendrán otros desafíos, como lo que puede ser la Exposición Nacional de la raza Criolla en la Sociedad Rural de Corrientes, algo en lo que vienen trabajando y que podría también ser una realidad el año próximo.