Daniel Montenegro renunció ayer como director deportivo de Independiente y agudizó la grave crisis institucional, económica y deportiva del club, mientras que los principales dirigentes aguardan por una respuesta de Julio Falcioni, quien puso como condición para hacerse cargo nuevamente del plantel profesional la unidad de las tres listas de candidatos a presidentes en las elecciones, que aún no tienen fecha de realización.
“De mi parte quedó clara la decisión de no continuar con Julio Falcioni como entrenador a comienzos de este año, cuando trajimos a Eduardo Domínguez como DT. Yo no me voy porque lo quieran de nuevo, son otras cosas las que hay detrás”, explicó el exfutbolista en declaraciones realizadas cuando fue a despedirse del plantel en el predio de Villa Domínico.