En la jornada de ayer, un grupo de choferes de Ersa fue notificado -de manera informal- de que no seguirán trabajando en la empresa. Esto generó una inmediata reacción del resto de los colectiveros que continuarán dialogando hoy con los responsables de la firma, y si no alcanzan un acuerdo podrían volver a las medidas de fuerza.
Hay que recordar que los choferes autoconvocados de esta empresa llevaron adelante el mes pasado, durante 6 días, un contundente plan de lucha para cobrar sus salarios adeudados.
Ahora evalúan los pasos a dar después de conocer la decisión de Ersa de prescindir de 18 choferes. “Charlamos con los representantes de la empresa y nos confirmaron que tienen que reducir personal al menos por tres meses”, precisó a El Litoral el vocero de los choferes autoconvocados, Julio Sabado.
Comentó que este grupo de trabajadores no recibió aún los telegramas de despido, pero sí propuestas de un arreglo económico a modo de indemnización. Sin embargo, ninguno habría aceptado este arreglo.
“Les expresamos que es totalmente injusto lo que están haciendo, son trabajadores que tienen su familia detrás”, agregó el vocero, a la vez que precisó que quedaron en estado de asamblea permanente y hoy buscarán volver a reunirse con los representantes de la firma para intentar alcanzar un acuerdo. Y de no destrabarse el conflicto, definirían medidas a tomar.