Tras 11 días de internación, un paciente recuperado de coronavirus busca concientizar sobre la importancia de acudir al hospital de campaña ante las primeras complicaciones respiratorias: “Me salvaron la vida”, aseguró. En diálogo con El Litoral, Cristian Barreto, de 35 años, compartió su mensaje sobre la importancia de no tener miedo de asistir al centro de salud del Hogar Escuela.
En su noveno día de aislamiento con diagnóstico positivo, las complicaciones respiratorias empezaron a aparecer.
“No fui al hospital de forma inmediata porque esperaba que los antibióticos hicieran efecto, pero mi cuerpo llegó al límite”, contó Barreto. “Quiero que la gente tome conciencia de la importancia de acudir a tiempo. En 72 horas el virus me deterioró los pulmones y no me podían desconectar del oxígeno. Soy una persona sana, no fumo. Pero tuve que volver a aprender a respirar y caminar de nuevo”, relató.
Barreto recibió en dos oportunidades plasma y considera que “los que estamos internados lo esperamos como si fuera la donación de un órgano. Es impresionate cómo te recupera”.
Barreto considera que, contrario a lo que se piensa, la mayoría de internados con los que compartió sala eran personas jóvenes.
“Es muy duro, al principio estaba muy deprimido porque la cabeza te juega en contra, no sabés lo que te puede pasar”. Luego de casi dos semanas de ingreso, fue dado de alta y destaca la atención clínica y humana.
El paciente remarcó la excelencia en el acompañamiento y en la contención otorgada por el personal del hospital de campaña: “Hacen un seguimiento de cada uno de tus síntomas, asisten y controlan que estés en contacto con tus familiares”.
“Los kinesiólogos te ayudan en la rehabilitación respiratoria, el personal de salud te brinda contención emocional y los estudios de seguimiento son diarios”, contó Barreto.
(IRB)