Renzo Ruiz Díaz, quien se encuentra detenido por varias denuncias de violencia de género, volvió a ser condenado por violar una orden de restricción y amenazar de muerte a una expareja y su hijo. En tanto, el 5 de noviembre comenzará a ser juzgado por haber golpeado a su expareja Ana Irene Díaz Colodrero, en un hecho ocurrido en Goya.
Ruiz Díaz, quien permanece detenido, fue a juicio oral nuevamente y recibió condena. El acusado ahora deberá cumplir 8 meses de prisión efectiva por desobediencia judicial. Además tiene otra pena a 3 años de prisión que estaba en suspenso. El dictamen se dio a conocer ayer a la mañana en modo virtual por el Tribunal Penal de Goya.
Tuvo dos juicios anteriores y le resta uno más que tiene fecha de inicio para noviembre.
En un juicio a mediados de 2020 fue declarado culpable, pero se le otorgó el beneficio de libertad condicional. Sin embargo, continuó acosando a su expareja que lo había llevado justamente a ese juicio.
A pesar de tener una orden perimetral para no acercarse a su expareja y la hija en común de ella, las abordó a ambas en la vía pública y las amenazó. Será trasladado a la Unidad Penal N° 1 de la capital provincial.
Ruiz Díaz se ganó la atención de los medios de comunicación cuando en junio pasado Ana Irene Díaz Colodrero dio a conocer a la prensa la pesadilla que estaba viviendo. Relató que sufría violencia de género por parte de su exnovio, quien rompió la puerta de la vivienda de su casa y la golpeó.
En este sentido, otra de las víctimas de violencia de género por parte del hombre, Adriana Arizaga, se refirió a un hecho que sucedió en 2013. La mujer fue atacada por Ruiz Díaz, le luxó la mandíbula y le propinó otras heridas graves en el rostro. “Siempre me mantuve aislada y no lo hice público por miedo a las represalias. La causa incluyó una lucha por seis o siete años. En el 2020 recién obtuve una sentencia a pesar de tener todas las pruebas médicas y documentación correspondiente”, añadió.
“La fiscalía de Goya hizo la denuncia de oficio y obtuve todas las respuestas que otras chicas no tuvieron. Renzo Oscar Gastón Ruíz Díaz tiene otras causas”, aseguró Arizaga.
La mujer siguió relatando su caso: “Tuve que irme de Santa Lucía porque había una persecución constante y amenazas todo el tiempo de él y de parte de su familia. Es una persona sumamente violenta, sin importar el género. Me costó mucho tiempo volver a caminar tranquila; cuando me vine a vivir a Goya me lo cruzaba y llegué a sentir tal paranoia que pensaba que me rastreaba, y hoy que levanté la voz, vuelvo a tener miedo no solo de él, sino de su familia”, finalizó.
(NG)