Jésica García, gendarme de 26 años, se mostraba en su Facebook con una sonrisa amarga a principio de julio, pese a estar visitando a su familia en San Ramón de la Nueva Orán, en Salta, junto a su hijo de 7 años. Su pareja y padre del niño, Luis Giménez (28), no aparece en ninguna de esas fotos. Estaban por separarse. Ayer, el hombre la mató de un tiro en la cabeza con su arma reglamentaria y se suicidó.
El femicidio, seguido de suicidio, ocurrió en la casa que ambos compartían en la localidad de Bella Vista, en el partido de San Miguel, delante del niño. Fue la hermana de Jésica la que descubrió el hecho cuando llegó el lunes a la propiedad para cuidar a su sobrino tras un viaje que realizó durante el fin de semana. De inmediato avisó a la Policía.
La mujer declaró que la pareja estaba por separarse debido a los hechos de violencia de género, malos tratos y amenazas de muerte por parte de Giménez, quien celaba constantemente a Jésica. No obstante, la víctima nunca lo había denunciado, explicó una fuente vinculada a la causa a Télam.