Tal y como de costumbre, el inicio de la velada inaugural fue puntual y tuvo como protagonistas al peregrino Alfredo Ellero portando a la Virgen de Itatí, al Ballet Oficial de la fiesta, al ballet Divino Niño y los héroes de Malvinas. Luego vino la bendición del pai Julián Zini, quien pidió al pueblo chamamecero que resista y cuide su tierra y su agua de los “nuevos invasores”.
"Pueblo chamamecero pueblo querido che gente, voy a decir en voz alta para vos y la región, lo que guarda mi memoria y escrito en mi cuero está. Esa historia que hoy me exige una especial bendición. Padre Dios ‘che ñande yara’, padre nuestro ‘ñanderú’ permiteme en esta Fiesta Nacional del Chamamé proclamar en tu presencia y a mi modo padre Dios, lo que pienso, creo y digo como profesión de Fe”, manifestó el padre y continuó: “Primero estuve en la selva, el monte, el río y el buen vivir que era nuestro ‘teko porá’. Y ese ‘areté’ que ensayaba lo de la tierra sin mal. Después llegó con su espada el conquistador para cortarnos la lengua el ‘ava ñee’ por eso inventé esa mezcla del ‘yopará’ y aunque pasé por guarango me hice entender. Después vino el misionero y su religión y nos salvó por un tiempo, pero se fue sufriendo mucho.
Después llegaron de a uno los invasores con su codicia insaciable, envidia y rencor barriendo lo que encontraban junto al yerbal, saqueo, incendio matanza y la dispersión. ¿Quiénes dejaron en ruinas los 30 pueblos de la misión y un siglo después quién inventó el genocidio del Paraguay? ¿Quiénes sacaron provecho con tanto horror? ¿Quién ha de pedir perdón y quién sabrá perdonar? Pasaron 200 años ¿y qué pasó?, la madre tierra y la hermana agua siguen aquí, pero ya la codicia encomendera las malvendió. ¿Dónde quedaron los sueños y la ordenanza de San Martín? Padre Dios, hoy día ya están de vuelta, por algo están ¿con que clases de espejitos nos llegan hoy?
¿O es patrimonio, o es parque o es producción?, lo decidirá el turismo, el nuevo Dios salvador. Para más está el ‘che arente poncho yeré’, el que si una vez lo supo ya se olvidó, que la tierra es nuestra madre y no puede ser jamás una mercancía al mejor postor.
Por todo eso reafirmo soy el rasguido, el balseado y el chamamé y soy muchas patrias chicas pero de la patria grande. Soy nación chamamecera que aquí se ha puesto de pie y soy fiesta nacional aquí en las 7 corrientes.
Por eso mismo mi pueblo quiero pedirte esta noche, puesto que yo ya me estoy yendo, un compromiso ante Dios. El enemigo está dentro y es tentador el ‘añá’, yo te pido que resistas, afírmate a tus raíces, cuidá y usá tu memoria, tené valores. Pueblo mío no te rindas, seguí cuidando la vida, cuida tu ‘ñande rekó’ y hasta tu último aliento seguí cantando conmigo ‘soy chamamé’”.