¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

PUBLICIDAD

Boca volvió a las prácticas con caras largas

Por El Litoral

Jueves, 03 de octubre de 2019 a las 01:19

El plantel de Boca Juniors volvió ayer a la tarde a los entrenamientos en el predio de Casa Amarilla en busca de superar la derrota del martes ante River por 2 a 0 en el Monumental, por el primer partido de semifinales de la Copa Libertadores 2019.
Si bien Alfaro sostuvo en la rueda de prensa que “lo anímico no hay que trabajarlo; el vestuario mostró que estos muchachos están de pie”, era innegable observar caras adustas y gestos de preocupación, no solo entre los jugadores y cuerpo técnico, sino también entre los dirigentes, según indicaron allegados al plantel.
En una práctica cerrada para la prensa, no hubo ayer bromas ni juegos posteriores a los triunfos. Aunque los voceros cercanos al club señalaron que el clima más tenso estaba del lado de los dirigentes, quienes se mantuvieron en riguroso silencio.
“Podemos quedar eliminados pero dejaremos la piel en la cancha de Boca. Y tenemos confianza en darlo vuelta”, había completado Alfaro cuando el ánimo “xeneize” estaba por el piso.
Más allá de las palabras del entrenador boquense en la conferencia de prensa luego de finalizado el encuentro, ayer los jugadores -cuando se encontraron en el vestuario de Casa Amarilla- trataron de alentarse mutuamente y, según se supo por allegados al cuerpo técnico, hubo reuniones entre distintos grupos.
El objetivo fue hacer una autocrítica por el rendimiento ante River para mejorar en lo individual y colectivo, en la revancha que se jugará el 22 de octubre en la Bombonera.
La novedad más saliente fue que el juvenil volante Nicolás Capaldo, quien fue expulsado, no podrá estar tampoco en el partido de la Superliga del próximo domingo ante Defensa y Justicia, por padecer un esguince en el tobillo izquierdo.
En tanto, por molestias musculares menores, Marcelo Weigandt e Iván Marcone estuvieron en kinesiología.
La idea de Alfaro es poner el próximo fin de semana en Florencio Varela a la mayoría de los que jugaron el martes, y es muy posible que Mauro Zárate -quien ayer estuvo en el banco de suplentes- vuelva a ser titular.
Los que disputaron el superclásico estuvieron en el gimnasio para cumplir ejercicios regenerativos, mientras que aquellos que lo hicieron pocos minutos o no jugaron, armaron un partido de fútbol en espacio reducido de 8 contra 8. En ese grupo estuvo Eduardo Salvio, quien había sido uno de los interrogantes del técnico antes del partido ante River, y se verá con el correr de los días si puede estar desde el arranque en Florencio Varela.
Mientras que Daniele De Rossi y Paolo Goltz, que fueron concentrados pero no estuvieron como relevos en el Monumental -ambos recuperándose de sus lesiones-, siguieron trabajando diferenciado y estarían muy cerca de estar a disposición del entrenador.

Últimas noticias

PUBLICIDAD