Luego de anunciar su renuncia, Theresa May, quien dimitirá como líder del Partido Conservador el 7 de junio, se lanzó la batalla por el liderazgo para ocupar su lugar en Gran Bretaña.
El próximo primer ministro conservador no será elegido por los electores británicos, sino por su partido. El problema es que deberá enfrentar el mismo drama frente al Brexit que la renunciante premier. Al menos 20 candidatos aspiran a reemplazarla.
May instó a que el proceso comience en la semana siguiente, la del 10 de junio, con vista a zanjar cuanto antes la incertidumbre.
Para ser proclamado formalmente, un candidato debe contar con el aval de al menos dos diputados ‘tories’. Si solo uno da el paso, será proclamado líder automáticamente, pero si la terna es amplia, los legisladores irán reduciendo la lista en una serie de votaciones hasta que solo queden dos que serán sometidos al escrutinio de todos los miembros del partido.