El 13 de marzo de este año, un balcón captó las miradas de la mayor parte de mundo. Se trata del balcón ubicado en la basílica del Vaticano donde el cardenal francés y protodiácono anunció el tradicional “Habemus Papam”, nombrando al cardenal argentino Jorge Mario Bergoglio como el nuevo papa Francisco, la primera cabeza visible de la Iglesia proveniente de América y sobre todo de la Argentina.
El balcón papal es uno de los emblemas más importantes y significativos de la Ciudad del Vaticano porque es el lugar donde se da a conocer al nuevo sumo pontífice luego de los cónclaves y de la elección del nuevo representante máximo de la Iglesia Católica Apostólica Romana. La plataforma externa fue decorada con cortinas rojas para la ocasión y fue el lugar donde el flamante Papa Francisco dio la primera bendición "Urbi et Orbi”, es decir, “a la ciudad y al mundo”, en latín.
