El presente de Nicolás Behringer dio un giro inesperado poco tiempo después de alcanzar la consagración en La Voz Argentina. Lejos de disfrutar sin sobresaltos del premio obtenido, el músico tomó una decisión importante que sorprendió a sus seguidores: vender el auto que ganó en el certamen para poder afrontar una situación personal vinculada a su salud, que lo obliga a pasar por el quirófano.
En su mensaje, Behringer comenzó adelantando que no se trataba de una decisión improvisada. “Como muchos saben, voy a vender el auto que me gané, pero no les conté las tres razones principales, y estoy seguro que la tercera los va a sorprender y les va a servir también”.
A partir de allí, desarrolló una reflexión que mezcló cuestiones económicas y personales. “Número 1: un auto es un pasivo. ¿Qué significa esto? Un activo te da dinero, un pasivo te lo quita”, expresó, al tiempo que explicó por qué, en su rutina diaria, no considera necesario contar con un vehículo propio.
“Todo lo que yo tengo, literal, me entra en un auto que puedo pedir en cualquier lado, así que pagar todos los impuestos y cosas que tienen que ver con el pasivo que es el auto… no lo uso para generar ingresos y no lo necesito”, explicó.
Sin embargo, fue la tercera razón la que terminó de darle sentido a su decisión. El cantante repasó parte de su historia personal y los obstáculos que enfrentó al iniciar su camino artístico. “Cuando yo quise dedicarme a estudiar canto, me dijeron que básicamente lo que yo quería hacer era como que alguien que tuviera la mitad de su cuerpo paralizado quisiera dedicarse a hacer carreras. No me detuve y fui igual por eso. Aprendí por mi cuenta”.
minutouno.com