Por Francisco Villagrán
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Especial para El Litoral
Sin duda hay muchas desapariciones en este mundo, que no tienen una explicación lógica y racional, personas que desaparecen de un día para otro y nunca se sabe nada más de ellos. La posibilidad de que alguien desaparezca sin dejar ningún rastro o huella ha sido uno de los grandes enigmas y temores de la humanidad, desde los tiempos más remotos. Lo primero que se ha hecho desde siglos pasados es culpar al diablo o a otras energías oscuras. En la actualidad se ha culpado a otras apariciones de ultratumba, a personas venidas desde otros planetas, a seres extraterrestres que llegan a nuestro planeta en naves espaciales, a seres interdimensionales, en fin, a todo fenómeno que no tenga una explicación lógica. Cualquiera que sea la causa, podemos decir que sin importar el lugar en que haya ocurrido la desaparición, todas tienen un patrón común: el misterio, el desconocimiento de lo que en verdad pudo haber pasado.
En el país de las estadísticas, Estados Unidos, se tiene un conteo de que tan solo en esa nación, cada año se agregan a la lista de desapariciones alrededor de un millón de personas sin tomar en cuenta los objetos que también desaparecen sin dejar ninguna huella ni rastro. Algunas de las personas que desaparecen son jóvenes que abandonan su hogar y buscan la compañía de otros como ellos. Pero casi siempre terminan por ser localizados. Existen también asesinatos que jamás son descubiertos. Son muchos los que abandonan sus casas perseguidos por las deudas o por acciones censurables y se van a vivir a otro lugar o país. Hay muchos que se caen a un pozo y nunca más se los encuentra ni se vuelve a saber de ellos. Pero incluso sumando estos casos que tienen una cierta lógica, el porcentaje de desapariciones que no tienen una explicación, sigue siendo muy alto. ¿Adónde se fueron esas personas que desaparecieron? ¿Quién o qué se los llevó? En la mayoría de los casos siempre se encuentra algo real, lleno de misterio y misticismo. Las desapariciones siempre ocurren sin ningún motivo aparente, desafiando toda explicación racional y en todos los casos dejando mal hasta al más diligente investigador. Lo más extraño de esto es que no solo sucede a personas sino que también enormes objetos como barcos o aviones llegan a desaparecer. En muchas ocasiones se esfumaron misteriosamente en el aire. Pero eso no es todo, ¿qué pasa cuando se lleva a cabo un caso contrario? Es decir cuando algo aparece inesperadamente, de golpe en este mundo. Un fenómeno igualmente extraño y misterioso. Personas y objetos que aparecen misteriosamente en un lugar. Muchas veces las reglas de lo racional se rompen, dando lugar a estas misteriosa apariciones y desapariciones.
El comienzo
Desde épocas inmemoriales se produjeron misteriosas desapariciones, especialmente en la época que grandes barcos veleros desaparecían a la vista de todos, como sucede hasta la actualidad en la enigmática zona del Triángulo de las Bermudas, ubicada entre Miami, Puerto Rico y las Bermudas. Un sector igual de misterioso es el de la zona opuesta en el planeta, ubicada en el Mar del diablo, en Japón, donde también ocurren extrañas y misteriosas desapariciones, solo que esta zona no tiene tanta publicidad y repercusión como los hechos que ocurren en el Triángulo de las Bermudas. En esta zona han desaparecido enormes barcos y aviones, con su tripulación, como también personas en pequeños barcos. Hasta hoy estos hechos ocurren, solo que no se comentan tanto o fueron tomados como algo normal, pero no es así. El enigma sigue en pie. Se puede afirmar que el tema comenzó “oficialmente” el 5 de diciembre de 1945, cuando se produjo la misteriosa desaparición del famoso Vuelo 19, un escuadrón de cinco bombarderos TBM Avenger, con toda su tripulación al mando del teniente Taylor, volando en excelentes condiciones y a plena luz del día, cuando de golpe dejaron de emitir por radio y se perdieron del radar. Ante esto, la Armada norteamericana envió en su rescate un hidroavión Martin Mariner, preparado para acuatizar en caso de ser necesario, con una tripulación especializada de 13 hombres veteranos de la guerra. Este avión también desapareció sin dejar rastro, ante el estupor de las autoridades. Se desplegó entonces un gigantesco raid cerca de 400 km a la redonda, pero no se encontró ni el más mínimo rastro de aviones que hayan caído al mar. Nunca más se supo nada y a partir de allí se tomó en serio la cosa, dándole más importancia. También hay casos de apariciones misteriosas, como alguien venido de otra dimensión, que aparece de golpe en el lugar menos esperado. Es lo que pasó en la década del 60 en Estados Unidos, donde de golpe apareció un hombre en pleno tráfico muy intenso de una populosa ciudad.
Llevaba ropas antiguas, de las usadas allá por el 1800, y al no poder manejarse en el tráfico ni conocer el significado de los semáforos, fue atropellado en la calle cuando intentaba cruzar. Las autoridades iniciaron una investigación ante este extraño caso y determinaron que el sujeto de acuerdo a su vestimenta y documentos encontrados, se ubicaba en tiempo y espacio en 1870 aproximadamente. Pero, ¿cómo llegó allí? ¿Fue transportado en el tiempo o atravesó involuntariamente un portal dimensional? Nunca se supo ni se sabrá.
Dentro de la interminable lista de barcos que se han esfumado en la zona del Triángulo de las Bermudas, está el caso del Mary Celeste, que merece un trato aparte por sus características muy singulares. El mencionado bergantín fue encontrado navegando a la deriva en el Océano Atlántico, sin nadie de su tripulación a bordo. El 5 de diciembre de 1872, los tripulantes de otro célebre barco, el Dei Gratia, divisaron un barco con las características muy conocidas, era el Mary Celeste, navegando a la deriva. Inmediatamente la tripulación del Dei Gratia se alertó y le hicieron señales, que no fueron contestadas. Ante esto, decidieron abordarlo y no encontraron nada anormal, todo estaba aparentemente en orden y no faltaba nada. Su cargamento estaba intacto y la pipa del capitán estaba aún humeante. Pero notaron que el bote salvavidas no estaba en su lugar, deba la impresión de que habían evacuado el barco rápidamente, pero, ¿por qué? Algo había sucedido… Remolcaron el barco hasta el puerto más cercano y allí lo dejaron, con un informe de lo que había sucedido. Nunca se supo lo que realmente pasó ni hubo un informe oficial.
Otro de los tantos casos ocurridos en el mar que no tienen explicación. Un verdadero enigma.