n El presidente Javier Milei desembarcó este sábado en la ciudad de Resistencia, Chaco, para asistir al acto de cierre de un Congreso de Iglesias Evangélicas, en el “Portal del Cielo”, un megatemplo para más de 15.000 personas que se inauguró el jueves pasado. Desde allí, el mandatario encabezó un discurso en el que reparó en la importancia de llevar adelante la “batalla cultural para combatir por las ideas de la libertad” y destacó la cultura judeocristiana, como promotora de “los valores de occidente”, en contraposición de las ideas que promueve la izquierda y la justicia social del peronismo.
Acompañado por su hermana y secretaria General de la Presidencia, Karina Milei, y el gobernador de Chaco, Leandro Zdero, el mandatario despotricó contra el socialismo. “En las últimas décadas, la izquierda dio de forma sostenida y efectiva su batalla cultural y ganó, convirtiendo la hegemonía en un relativismo cultural”, comenzó. Y agregó: “Se renunció a la cultura del trabajo, ahorro, valor sagrado de nuestra propia palabra, al bien como valor supremo, y se reemplazaron por quimeras: la fetichización del ocio, el gasto descontrolado, el endeudamiento irresponsable y la mentira”.
Luego apuntó contra una de los estandartes más utilizados por el Partido Justicialista (PJ), la justicia social. “No debe haber nada más antijudeocristiano que la idea de la justicia social. Porque la justicia social básicamente es robarle a una persona el fruto de su trabajo y dárselo a otra”, dijo, ya que para él “es la caridad impuesta por la fuerza, y la caridad no puede ser a punta de pistola, tiene que emerger del corazón, del alma y espíritu”.
“La justicia social está francamente en contra del séptimo y décimo mandamiento, porque robar está mal y codiciar los bienes ajenos también”, sentenció Milei frente a miles de feligreses. Entonces, el Presidente vinculó la envidia con el socialismo, alegando que los “resentidos y envidiosos que no tienen los medios para robarle al otro lo que tiene” crearon el Estado, el cual calificó de un “falso dios para adorar y robarle a la gente el fruto y bien de su trabajo”.
Bajo esa misma línea, Milei sostuvo que la izquierda justifica el comportamiento criminal o antisocial bajo el argumento de que los individuos viven en un sistema injusto. “No hace falta elaborar el riesgo que implica semejante cosmovisión, que no puede terminar de otra manera que la disolución del tejido social. Si no miren como nos ha ido durante años promoviendo la doctrina Zaffaroni donde se puso a la víctima en el lugar del victimario y viceversa. Pero como dijimos, el que las hace las paga”, arremetió luego.
La visita de Milei al Chaco, se pactó de manera directa entre el primer mandatario y el pastor Jorge Ledesma, con quien sostiene un “vínculo afectivo desde hace tiempo”, de acuerdo a fuentes muy informadas.
“La visita de Milei al Chaco es parte de la “batalla espiritual”, que para él es tan importante como la batalla cultural”, dijo a este medio un operador local con llegada al Presidente. “Él sostiene este tipo de vínculos, y con el pastor Ledesma, forjó una relación que va por ese camino”, precisó al respecto.