El pasado sábado, dos hermanos discutieron y mataron a puñaladas a su cuñado. Ocurrió en una vivienda ubicada en la localidad de La Cruz y los homicidas ya fueron aprehendidos.
Una vivienda ubicada en la ciudad de Ituzaingó fue escenario ayer de un crimen seguido de suicidio. Aparentemente, una fuerte discusión habría desatado la tragedia familiar. Una mujer fue hallada sin vida en la cama matrimonial y se especula murió a severos golpes en la cabeza. En tanto su marido minutos después se quitó la vida colgándose en el baño. Se que el supuesto asesino sería su pareja, quien antes de quitarse la vida habría llamado a la Policía avisando lo ocurrido.
El cuerpo de la mujer fue derivado a la morgue judicial del hospital local y según un informe preliminar el deceso se produjo por traumatismo de cráneo, en tanto el hombre se habría ahorcado con una soga.
Por el caso, que hasta el cierre de esta edición contaba con varias hipótesis, la Policía se entrevistó con varios vecinos y cada uno dio su versión al respecto. Efectivos de la Comisaría de Distrito se encuentran a cargo de la instrucción sumarial y el caso, a prima facie, fue caratulado como supuesto homicidio seguido de suicidio. Por ahora no hay muchas pistas que orienten las pesquisas y con el correr de las investigaciones podrían surgir nuevos datos. Por ahora no hay personas demoradas.
De acuerdo a las primeras averiguaciones, el hecho se tomó conocimiento alrededor de las 7.30 de ayer cuando efectivos de la Comisaría de Distrito fue alertado telefónicamente de un supuesto crimen. El escenario fue una vivienda ubicada por calles Entre Ríos, casi Perú de la ciudad de Ituzaingó.
En esa casa vivían como pareja, Viviana Correa de 47 años, y Sirilo Gómez de 46 años.
Fuentes policiales indicaron que un llamado telefónico al 911 avisó del hecho y expresó: “te llamo porque le mate a Ana”. Ante tales circunstancias diligenciaron una orden de allanamiento.
Durante las requisas hallaron en la habitación matrimonial, sobre la cama y en posición cubito dorsal, el cuerpo sin vida de Viviana Correa. A simple vista no presentaba lesiones ni de arma de fuego ni blanca, presumiéndose que fue asesinada con golpes en la cabeza.
En tanto en el baño hallaron colgado, de una cuerda de fue atada a un hierro del techo, a Sirilo Gómez, quien era conocido en la zona con el apodo de “Lili” y pareja de Correa.
El cuerpo de la mujer fue derivado al hospital local, donde fue sometido a la correspondiente autopsia médico-legal. Aparentemente la mujer murió por traumatismo de cráneo.
Por el hecho, la Policía dialogó con algunos vecinos y algunos precisaron que “la drástica determinación tomada por el hombre podría deberse a razones sentimentales vinculadas con su ex pareja, de quien se habría separada hace un tiempo”.
Hasta el cierre de esta edición eran varias las hipótesis que rodeaban al hecho y los investigadores no descartan ninguna. En el lugar se realizaron las pericias de rigor correspondientes y en la Comisaría de Distrito se sustancia la actuación sumarial del caso.