El presidente ruso anunció ayer medidas que buscan frenar la caída del rublo y contrarrestar las sanciones impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea en respuesta a la invasión a Ucrania.
Para defender la economía y la moneda ante las sanciones occidentales, el Banco Central de Rusia duplicó su tasa de interés de referencia de 10,5%, llevándola a 20%, y determinó que la Bolsa de Moscú permaneciera cerrada, ante el hundimiento de la moneda.
Por su parte, los exportadores también se verán obligados a convertir en rublos el 80% de sus ingresos obtenidos en monedas extranjeras.
Entre las sanciones anunciadas, varios países excluyeron a los bancos rusos del sistema internacional de pagos Swift y prohibieron cualquier transacción con el Banco Central de Rusia. También se anunciaron medidas comerciales, como el cierre del espacio aéreo a los aviones rusos por parte de Europa.
(EN)