n El representante legal del Instituto Saint Martin Aníbal Tosetti, junto a un reducido grupo de establecimientos educativos de la ciudad de Corrientes fundaron en 2006 la Cámara Correntina de Instituciones Educativas de Gestión Privada (Caciep). 17 años después el número de integrantes aumentó ostensiblemente, incluyendo establecimientos del interior provincial. Fue el tercer presidente de la Cámara, lo precedieron Augusto Fernández (Colegio Yapeyú), Martiniano Ganora (Colegio Informático). Lo sucedieron Dora Lauro (Instituto Nuevo Siglo), Juan Pablo Brunel (Instituto Humanístico) Hoy ejerce la presidencia Maximiliano Kugler (Instituto Saint Patrick).
El Instituto Saint Martin que en 2023 cumplió 20 años de existencia, abarca los tres niveles educativos, teniendo entre sus objetivos brindar los conocimientos que se exigirán en un futuro cercano. Esos requerimientos serán, entre tantos otros: la defensa y cuidado del medioambiente. Todos y en especial los niños y jóvenes, hombres y mujeres del mañana, deberán profundizar el aprendizaje del “cuidado, ordenamiento y saneamiento de nuestra casa” (el planeta Tierra).
El citado tema dentro la institución lo lleva adelante la vicerrectora, profesora Luciana Tosetti, quien asegura:
“El día mundial del medioambiente fue establecido por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1972, para marcar la apertura de la Conferencia de Estocolmo sobre el medio ambiente humano. Es un vehículo por el cual la ONU estimula el conocimiento mundial del medioambiente y aumenta la atención y acción política. Los principales objetivos son: a) Dar una cara humana a los problemas medioambientales, acercándolos así al común de la gente. b) Capacitar a personas y a ONG a ser agentes activos del desarrollo sostenible y equitativo. c) Promover la educación y la comprensión para lograr un cambio de actitud hacia los problemas medioambientales. d) Impulsar acciones que aseguren a todas las naciones y sus habitantes disfrutar un futuro mas saludable, mas seguro y mas próspero.
Medio siglo ha transcurrido desde lo declarado en la Conferencia de Estocolmo y los resultados fueron prácticamente nulos según dicen los optimistas, y rayano con lo catastrófico para los pesimistas. Según el Dr. Juan Rivera, investigador del Conicet, el calentamiento global no tiene precedentes, pero su impacto es predecible. Todos los países quieren que su economía crezca, pero el costo que se está pagando es muy caro y tiende a ser peor. La quema de combustibles fósiles genera gases de efecto invernadero y potencia la participación humana en el calentamiento global, provocando aumentos muy marcados en las temperaturas que podrían alcanzar seis grados de aquí al 2100. Esas alzas de temperaturas hará que muchas especies animales perezcan por no poder adaptarse, perdiéndose también vegetales, derretimiento de hielos que afectará a las poblaciones que dependan de esos recursos hídricos.
Estas situaciones alarmantes de sucesivas olas de calor ya sufrieron en los últimos meses los países europeos del Mediterráneo, sudeste asiático, China, EE.UU y Mexico. Son procesos de calentamiento que no tienen precedente. La posibilidad que se repitan éstos fenómenos ha aumentado cien veces. Próximamente se va a incrementar las olas de calor y la gente expuesta será mayor porque hay mas presión sobre los recursos naturales y porque hay gente que va a necesitar más agua y alimento.
El secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, inauguró el mes pasado una cumbre sobre cambio climático. Sostuvo que se abrió las puertas del infierno. Si no hay cambios favorables la humanidad se dirige hacia un mundo peligroso e inestable.
El futuro no está marcado, le corresponde decidir a los líderes mundiales, pero todos expresó el diplomático, desde los mas pequeños pueden con su conducta y accionar aportar su granito de arena. Para ese menester es imprescindible que padres y docentes enseñen desde temprana edad a hijos y alumnos a “cuidar la casa” (el planeta tierra).
Promover la exploración y el contacto con el aire libre es fundamental para el desarrollo físico y emocional de los alumnos. Así aprenderán a amar la naturaleza. “Lo que se ama, se cuida y se valora”.
En su momento las charlas brindadas a los niños sobre temas de seguridad vial sirvió para que ellos mismos (los mas pequeños) se enojen y “reten” a sus padres cuando no respetan las señales de tránsito, cuando van muy rápidos, cuando cruzan semáforos en rojo o amarillo, cuando no dan prioridad al peatón.
Eso mismo habría que hacer entre otras cosas con el medioambiente. Enseñar y reiterar tantas veces sea necesario: a no arrojar basura en cualquier lugar, tirar los envases plásticos, pilas, baterías en el recipiente correspondiente, cerrar la canilla, cuidar y regar flores, plantas y árboles.
Que expresen a sus padres la necesidad de controlar el vehículo para que no propague “humo tóxico”, a que los “desechos tecnológicos” se lleven a los lugares adecuados, a juntar las heces de las mascotas y tantos otros tips de fácil trasmisión y aprendizaje
Además de la familia, el colegio debe ser un lugar de socialización y desarrollo individual. Es un proceso de comunicación que debe impactar positivamente en los alumnos. Los modelos que se trasmiten son fundamentales para que se aprenda a valorar y querer “nuestra casa”. Los cambios deben producirse de adentro hacia fuera. También habrá que capacitar a los docentes en éste tema que hoy parece lejano, pero que ya está en el umbral de cada uno. Así se logrará en los niños y jóvenes mentes abiertas y colaborativas.
Los cinco problemas ambientales que jaquean a la Argentina son esencialmente: clima, contaminación de cuencas de agua, tala de bosques, entierro de la basura y falta de mayores superficies de áreas protegida. El cambio climático ya está impactando con mas sequías y mas inundaciones. La falta de acceso al agua potable, sumado al problema de su contaminación, el derretimiento de glaciares, residuos que siguen abandonándose en basurales a cielo abierto, aunque si se hiciera una recolección diferenciada se podría recuperar mas del 50% de la basura.
Se han hecho avances pero todavía no hay definida una política ambiental seria. La Fundación Vida Silvestre sigue reclamando mas áreas protegidas. Solo algo más del 10% de la superficie del país está protegida en forma de parques nacionales, o reservas provinciales o municipales. En la Argentina se sigue deforestando pese a la existencia de la Ley de Bosques. Se debe bajar la deforestación y preservar más hábitats para especies amenazadas. Invertir en energías renovables. El Gran Chaco es una de las regiones más afectadas con la deforestación y/o degradación. Por otra parte el sector energético genera el 50% de emisiones de gases de efecto invernadero.
Hay 400 millones de personas que viven en regiones con grave escasez de agua. Cientos de niños siguen muriendo aún hoy por falta de agua potable. En los países desarrollados el uso doméstico del agua es 10 veces mayor que en el tercer mundo. La evolución del uso mundial de agua es creciente desde 1900 como también aumenta la diferencia entre la captación del agua y su consumo. En el año 2010 el despilfarro de agua dulce de los sectores agrícola, doméstico e industrial sumó 2.000 kilómetros cúbico de agua y va en aumento.
Hoy la contaminación del agua dulce afecta a 2.500 millones de personas y la falta de agua potable amenaza diariamente a 1.000 millones. Desde 1950 el uso de agua se ha triplicado y más de 2.800 millones de personas en 48 países tendrán que enfrentar en 2030 restricciones de agua
La Organización Mundial de Conservación reveló que en los últimos 40 años, bajó 58% la cantidad de animales en el planeta. Los expertos afirman que esta situación se produjo por la pérdida del hábitat y la degradación y sobreexplotación de los recursos naturales.
La biodiversidad más afectada fue la de agua dulce con una reducción cercana al 80%, sufriendo en consecuencia un declive la población de especies terrestres y marinas. Esta tendencia tiende a agravarse con una potencial reducción de dos terceras partes de la vida silvestre. En nuestro país el yaguareté disminuyó su población a causa del cambio del uso del suelo, producto de la deforestación y la cacería.
El Índice de Calidad de Vida hecho por expertos del Conicet expresa que la calidad de vida de un individuo está determinada por múltiples factores. El económico, el social, el cultural y el ambiental son algunos de los que tienen mayor incidencia. El concepto de calidad de vida se vincula al bienestar dependiendo de bases materiales. Según las últimas mediciones la región Nordeste se encuentra entre las mas rezagadas. Para saber como vive la gente se tomó en un 60% indicadores socio económicos: salud, educación, vivienda. A su vez cada una contiene subclasificaciones como la tasa de mortalidad infantil, población sin obra social, sin inodoro y con hacinamiento.
En un 40% se tomaron indicadores ambientales, que comprenden los recursos recreativos: playas, balnearios, centros termales, nieve/hielo, cursos de agua, parques y espacios verdes, centros culturales, de esparcimiento y deportivos. Los problemas ambientales propiamente dicho comprende el uso de plaguicidas en agricultura, industria y minería, contaminación, ruido, congestionamiento, inseguridad, asentamientos precarios, basurales, tornados, inundabilidad, sequía, disconfort climático,
Lo que hoy día ya ocurre “en nuestra casa”, debe constituir una severa señal de alarma. Para colmo las estrategias de prevención para el futuro están a mitad de camino. De nosotros depende.
Esta y otras problemáticas que son compartidas por los demás integrantes de la Cámara, permite un accionar activo y de continua intercomunicación, con el propósito de lograr en lo interno una mejor gestión educativa y en lo externo hacer un aporte a la comunidad en la cual estamos inserta.