POR VERONICA ECHEZARRAGA
@veroechezarraga
El Complejo Cultural Guido Miranda fue escenario el sábado de una noche en la que la banda formoseña Guauchos y el dúo paraguayo Purahéi Soul dieron una cátedra musical digna de las más exigentes salas. Fue un show de dos horas en las que los géneros de raíz se fusionaron con total naturalidad al pop, soul y al jazz. El espectáculo se dio en el marco del Circuito Cultural Guaraní que nuclea a productores, gestores y músicos de Paraguay, Brasil y Argentina.
Luego de varios años de silencio pos pandemia, Guauchos volvió a girar y uno de los escenarios elegidos para esta vuelta al ruedo fue el Complejo Cultural Guido Miranda de Resistencia donde se presentó también el dúo paraguayo Purahéi Soul. El del sábado fue un show de dos horas donde el arte de calidad hipnotizó al auditorio del teatro chaqueño.
Acompañados solo por una guitarra, Jennifer Hicks y Miguel Narváez de Purahéi Soul rompieron el hielo de la noche y demostraron que con poco se puede hacer mucho cuando el talento sobra. Es que estos paraguayos siempre impactan con su sola presencia y conquistan cuando su música empieza a adueñarse de la escena. Esto fue justamente lo que pasó el sábado, cuando su espectáculo combinó con excelencia rituales, sonidos regionales, jazz y soul. El show contó además con la participación de la banda Negrovs con quien interpretaron “Swing guaraní”.
El broche de oro de la velada fue de Guauchos con un magistral espectáculo electroarmónico que invitó a un placentero viaje sonoro. La banda conformada por músicos de primer nivel y voces prodigiosas, se ganó al auditorio desde los primeros acordes hasta el final de la noche.
Guauchos está integrado por el cantante y compositor Federico Baldus, Lucas Caballero, cantante, guitarrista y productor y Juan Manuel Ramírez, baterista e ingeniero de audio. Completaron el grupo el violinista Matías Romero, Juanmi Castellani, Gastón Benítez y Agustín Garay.
Un punto elevado de la noche tuvo que ver con el respeto por el arte evidenciado tanto en Guauchos como en Purahéi, que coincidieron al presentar una puesta en escena donde la iluminación y el sonido fueron el complemento ideal para shows perfectamente coreografiados y ordenados.
fotografias David Lescano