A través de sus redes sociales, el Museo de Ciencias Naturales Amado Bonpland muestra y explica las especies que actualmente se encuentran expuestas. La intención de esta iniciativa es continuar difundiendo cultura mientras el organismo permanezca con las puertas cerradas. Esta semana exponen al yurumí.
“Yurumí” es el nombre que recibe en guaraní, aunque también se lo denomina tamanduáguazú, oso hormiguero bandera. Esta especie se ha convertido, desde 1977, en símbolo de la Fundación Vida Silvestre Argentina.
El oso hormiguero tiene un abundante pelaje cuya coloración varía del negro al blanco pasando por diversas tonalidades de gris y se prolonga en una extensa cola de pelos largos, los cuales le otorgan un aspecto de abanico o bandera. Pueden llegar a alcanzar los 2 metros de largo, de los cuales 80 centímetros corresponden a la cola. Su hocico es largo y estrecho, no tiene dientes y su lengua es larga. Está armado con dos potentes garras cavadoras en las patas delanteras.
Es una especie amenazada porque los capturan como mascota o trofeo. Es perseguido, ya que se supone que puede matar los perros de las estancias o de las comunidades rurales. Por su extraño aspecto es capturado como presa viva para colecciones y zoológicos privados. La destrucción de su hábitat, su bajo potencial reproductivo y su alta vulnerabilidad ante el hombre son los factores de riesgo que más sufren.
(VAE)