El ministro de Economía, Martín Guzmán, envió a la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, la cancelación formal del programa Stand-By que acordó Mauricio Macri con Christine Lagarde bajo los auspicios de la Casa Blanca. Macri nunca cumplió las metas negociadas con el FMI y dispendió 44.000 millones de dólares -sobre un total otorgado de 56.000 millones-, facilitando así la fuga de divisas a la vez que aplicaba un plan de ajuste que fue clave para explicar su derrota frente a Alberto Fernández. El documento oficial remitido por Guzman a Washington sólo implica que Argentina ya no está obligada a continuar con el programa Stand-By que aceptó Macri y trató de ejecutar Nicolás Dujovne, entonces ministro de Economía. Desde esta perspectiva, el plan de Lagarde-Macri fue un fracaso y aún restan devolver los 44.000 millones de dólares que empezaron a ingresar a mediados de 2018 y que terminaron de evaporarse en 2019.
Guzmán convocó a Cecilia Todesca -vicejefa de Gabinete-, a Matías Kulfas -ministro de la Producción-, a Sergio Chodos -representante de la Argentina en el FMI- y a Miguel Pesce -titular del Banco Central- para ratificar que la renuncia formal al Stand-By/Macri había llegado al despacho de Georgieva y para analizar la estrategia frente a una nueva negociación con el organismo bilateral.
(AG)