En las últimas horas llegó al Juzgado de Instrucción 3 de Corrientes el caso de Lautaro Rosé, el joven ahogado en el río Paraná en el marco de una persecución policial, y la investigación comenzará a tener intervención de una fuerza federal, pero también, con una querellante formal, la madre del chico.
Este lunes la titular del Juzgado de Instrucción N°3, Josefina González Cabañas, se avocó al conocimiento de la causa en la que se investigan las circunstancias de la muerte de Rosé.
La magistrada dispuso una serie de medidas probatorias que habían sido propuestas por la Fiscalía de Instrucción N° 6, de Gustavo Rubineau, que tiene a su cargo la investigación. E hizo lugar a la citación –en calidad de imputados- de un conjunto de funcionarios policiales pertenecientes a distintas agrupaciones, hasta ahora sospechados de la presunta intervención en los hechos.
"Por otra parte, dio intervención a la Asesoría de Menores N°2 y al Juzgado de Menores N°3- Secretaría Civil- respecto de las medidas proteccionales referidas a uno de los adolescentes víctimas", informó este martes un comunicado oficial del Poder Judicial.
También se hizo lugar a la constitución de querellante conjunta de la señora Juana María Luz Sotelo y se dispuso la realización de las medidas de prueba por ella solicitadas, con el fin de hacer efectivo el derecho a la víctima en la participación del proceso penal.
En tanto que se solicitó la colaboración de la Gendarmería Nacional para la realización de aquellas diligencias que las partes pudieran necesitar, "todo ello con el objetivo de esclarecer los hechos investigados y determinar los responsables del mismo", informó la Justicia.