Enfermedad cardiovascular: ¿deben preocuparse las mujeres?

Cuando nos hacemos la pregunta acerca de las enfermedades con mayor incidencia en las mujeres inmediatamente pensamos en aquellas que afectan la parte ginecológica, como el cáncer de mama, útero y ovarios. Sin embargo, la enfermedad cardiovascular es responsable del doble del total de las muertes que aquellas pueden generar.

A pesar de que la enfermedad cardiovascular es la primera causa de muerte de la mujer, su riesgo cardiovascular no es percibido. La prevalencia de la enfermedad cardiovascular en la mujer es similar a la del hombre, aunque se pone en evidencia con 5 a 10 años de retraso. Las mujeres premenopáusicas parecen estar protegidas contra la enfermedad cardiovascular, comparadas con hombres de similar edad. Sin embargo, esta protección desaparece en la posmenopausia.

Según explicó a Vivir Bien el doctor Diego Huberto Picchio, respecto a la salud cardiovascular las mujeres se ven protegidas durante la etapa fértil por los estrógenos, hormonas sexuales femeninas y encargadas de mantener los niveles de lípidos en la sangre, lo que permite mantener buen estado cardiovascular. Al entrar al período de la menopausia, la protección hormonal disminuye, el riesgo de sufrir enfermedad coronaria aumenta y aquella protección que anteriormente estaba dada por las hormonas, ahora debe ser suplantada por hábitos saludables que favorezcan la salud de su corazón. Es decir, menopausia a menor edad, mayor mortalidad cardiovascular a edades más tempranas.

Según explicó el especialista, en ocasiones el riesgo cardiovascular de la mujer no es percibido, ya que en muchos casos la mujer no tiene síntomas visibles, clínicamente se puede presentar diferente, por ejemplo, en pacientes con problemas renales crónicos, diabéticos o en mayores de 65 años. Este rango de pacientes, según explicó el doctor Picchio, podría presentar síntomas atípicos como dolor abdominal, fatiga falta de aire o sudoración. 

Factores de riesgo y prevención

La enfermedad cardiovascular puede prevenirse o reducirse si se controlan sus factores de riesgo. El doctor Diego Huberto Picchio advirtió que las mujeres al controlar sus conductas y llevando un estilo de vida saludable, pueden disminuir los riesgos.  ¿Qué significa estilo de vida saludable? Esto significa en primer lugar hacer algún tipo de ejercicio físico, mantener una alimentación cardiosaludable. Es esencial, según detalló el doctor, aumentar el consumo de verduras, frutas y legumbres ya que estos alimentos contienen vitaminas, minerales y calcio. Evitar el consumo de sal o colocar la sal (poca) en alimentos ya cocidos, evitar el consumo de alimentos procesados con alto contenido de sodio. “El plato ideal debe contener un 50% de verduras, 25% de alguna carne magra y 25% de alguna legumbre”, recomendó el médico. 

Es fundamental, según comentó el especialista, que las mujeres visiten de manera precoz (30, 40 años) a su cardiólogo o medico clínico para realizarse los controles correspondientes, esta es una buena manera de prevención. Los factores de riesgo que las mujeres puedan desarrollar cumplen un rol crucial. Por eso, un simple electrocardiograma puede dar un rápido informe para ver en qué estado se encuentra el corazón.

A partir de los 40 años se debe realizar un laboratorio completo que incluya colesterolemia ya que, si bien la mujer cuenta con una protección estrogénica, los factores hereditarios o dislipidemia familiar (esto es, el aumento del colesterol y triglicéridos paternos) tienen una fuerte incidencia. Muchas veces se encuentran presentes desde temprana edad y son ignorados.

Las mujeres no deben descuidar todos los chequeos y controles preventivos, necesarios para mantener la salud. Además del Papanicolaou y el control de mamas, es importante realizar un electrocardiograma y el control adecuado de los factores de riesgo cardiovascular para la detección precoz de esta enfermedad que se ha convertido, lamentablemente, en la primera causa de muerte en las mujeres.

Tener en cuenta estos 10 consejos:

1) Conocé tu presión arterial.

2)  Conocé tu colesterol.

3) Conocé tu nivel de azúcar en sangre (glucemia).

4) Conocé las enfermedades de tus padres.

5) Comé en forma saludable.

6) No fumes.

7) Mantené un peso saludable.

8) Realizá actividad física todos los días.

9) Seguí los consejos de tu médico.

10) No te automediques ni abandones el tratamiento.

¡A moverse! 

El doctor Diego Huberto Picchio recomienda realizar zumba, ya que es una actividad para todo el mundo, no hace falta tener una base. Las personas que no tienen coordinación aprenden y lo pueden llevar. No es algo que tenga un grado de dificultad muy elevado. Son pasos simples para que esa persona que no se engancha con otra actividad aeróbica, como cinta o bicicleta, pueda moverse y obtener el mismo resultado bailando. Al ser apta para no iniciados, zumba no tiene movimientos técnicos muy exigidos, por lo que no presenta riesgos de lesión.

Beneficios

Es un trabajo aeróbico que no tiene un alto impacto.

• Es ideal para quienes empiezan a hacer trabajo aeróbico.

• Mejora la circulación.

• Entrena la coordinación.

• Es bueno para el equilibrio.

• Da más armonía y fluidez a los movimientos.

• Eleva la autoestima.

• Genera más confianza en sí mismo.

• Brinda la posibilidad de conocer el propio cuerpo en determinado tiempo y espacio.

• Permite entrenar la coordinación entre oído y el ritmo.

• Da sensación de libertad.

• Fortalece los ligamentos.

• Ayuda a bajar de peso.