Apenas se bajó del móvil policial que lo depositó en la unidad penitenciaria federal de Esquel, el lonko Facundo Jones Huala reivindicó a la agrupación que fundó hace cerca de 10 años.
“¡Fuera winca!, ¡Marichiweu!, ¡Liberación a la Nación Mapuche!, ¡Que viva la RAM!”, se le escuchó gritar a Jones Huala mientras agentes del Escuadrón 34 lo introducían a las dependencias penitenciarias.
Hacía poco más de un año que Jones Huala no pronunciaba una palabra en público. La anterior había sido cuando la justicia chilena lo liberó brevemente de su encierro en una cárcel de Temuco.
Con esta expresión, el referente mapuche desmintió las afirmaciones del gobierno de Alberto Fernández, acerca de que Resistencia Ancestral Mapuche es un invento mediático y que la única RAM en el país es una “camioneta”.
“La única RAM es la camioneta”, aseguró el ministro de Ambiente, Juan Cabandié durante su visita a la zona de los incendios en El Hoyo, donde se encontraron panfletos de la RAM, declarando, una vez más, la guerra al país.
En total se estima que Jones Huala y los suyos perpetraron unos 100 ataques en la Patagonia entre 2015 y 2022, bajo el signo de la RAM. Incluyen incendios de propiedades, bosques autóctonos, maquinaria vial, cortes de ruta, usurpaciones, robo de ganado, amenazas y agresiones a vecinos.