La Municipalidad de Corrientes demolerá 25 construcciones ilegales

La Municipalidad avanza en la demolición de construcciones ilegales que se edificaron sobre espacio público en distintos puntos de la ciudad. Ya se ejecutaron tres: una en el barrio San Gerónimo, y dos en las Mil Viviendas. Y hay un total de 25 expedientes iniciados que tienen sentencia administrativa para la demolición. 

Una alta fuente municipal confirmó a El Litoral que se avanza en la demolición de edificaciones “ilegales” que se construyeron sobre espacio público. Para ello se realizó un exhaustivo trabajo que se inició hace cuatro años y se afianzó en 2019 cuando el Superior Tribunal de Justicia determinó que a la Municipalidad le correspondía el poder de policía sobre los espacios públicos. A esa instancia se llegó tras la judicialización que un vecino realizó ante las intimaciones comunales. 

Con el resguardo legal correspondiente, los funcionarios de la Comuna avanzaron en un protocolo avalado por la Justicia para recuperar los espacios públicos ocupados de manera ilegal. Primero se identifica el predio, se intima al usurpador y se le otorga el derecho a defensa (se le solicita el permiso o que justifique el uso del espacio), finalmente, se emite una sentencia, previo edicto de 60 días, y se le otorga la posibilidad de demoler la edificación, caso contrario lo hará la comuna, pero el acusado deberá cargar con los gastos.

La tercera demolición que concretó la Comuna fue una edificación sobre la avenida La Paz, entre Cosquín y Rafaela, en las 536 Viviendas. Funcionaba allí una peluquería y un local de venta de celulares. La ejecución se concretó el lunes. 

Antes, los agentes municipales, junto a la Policía, habían demolido un local que se construía para instalar una agencia de quiniela, solo a 100 metros de donde funcionaba la peluquería destruida. Otra de las ejecuciones realizadas fue en el barrio San Gerónimo, donde una mujer amplió su departamento sobre espacio público. También se había intimado a un conocido lugar de comidas ubicado en cercanías de San Lorenzo e Yrigoyen, que instaló mesas, sillas y cartelería sin autorización.

“Las irregularidades datan de muchos años. Hay edificaciones identificadas en plena costanera y en muchos barrios. Hay una decisión política en poner fin a estos excesos, el espacio público no puede ocuparse sin autorización, nos ampara la ley. Es una decisión difícil, por el costo político, pero hay mucha gente seria trabajando y estamos en un estado de derecho, no se puede hacer lo que se nos venga en gana”, dijo la fuente consultada.

Ciudadanos de distintas partes de la ciudad realizaron sus reclamos a través de las redes sociales por el avance de construcciones irregulares domiciliarias sobre espacios públicos. Por ejemplo, en el barrio San Gerónimo denunciaron la creación de extensiones en altura sobre espacios verdes comunitarios en zonas de monoblocks, los cuales no se encuentran controlados.

Uno de los puntos habituales, donde la Comuna en años anteriores llevó a cabo algunas demoliciones, es las Mil Viviendas, donde proliferan las construcciones irregulares de particulares sobre espacios públicos y pulmones verdes comunitarios entre edificios y viviendas.